El ciclista español Alberto Contador (Saxo Bank) ha prolongado su buen estado de forma y se ha apuntado la victoria en la clásica Milán-Turín, que este miércoles volvía a disputarse tras ausentarse del calendario desde el año 2007.
El madrileño resolvió con maestría en el último de los 194 kilómetros que componían la carrera, con salida en Novate Milanese y llegada en alto a Superga. Antes, el protagonismo correspondió a la escapada de los italianos Matteo Rabottini (Farnese Vini) y Federico Rocchetti (Utensilnord), pero el trabajo de Liquigas y Saxo Bank abortó su aventura.
Con seis compañeros de equipo trabajando para Contador en la primera de las dos ascensiones al Superga, puerto de solo cinco kilómetros, pero rampas, el madrileño vio preparado el terreno para demostrar su clase en los instantes decisivos de la carrera.
El madrileño, que nunca había conquistado una carrera de un solo día en su dilatada carrera profesional, lanzó un ataque demoledor en el último kilómetro para imponerse por delante de Diego Ulissi (Lampre-ISD), Fredrik Kessiakoff (Astana) y Joaquím ‘Purito’ Rodríguez (Katusha).
De esta forma, el madrileño suma una carrera a su palmarés que le sirve para endulzar su amargo paso por los Mundiales de Limburgo, donde no logró pelear por las medallas. Contador, que volvió a competir en agosto tras cumplir su sanción por dopaje, cerrará la temporada el próximo sábado en el Giro de Lombardia.
«Estoy muy contento por ganar, especialmente por hacerlo en Italia»
El ciclista español Alberto Contador (Saxo Bank) ha tenido un emotivo recuerdo para dedicarle un triunfo «especial por hacerlo en Italia» en la clásica Milán-Turín a Víctor Cabedo, ciclista del Euskaltel fallecido la semana pasada tras sufrir un accidente durante un entrenamiento.
«Ha sido en cierto modo una victoria inesperada. Se la dedico a todos mis compañeros y a alguien que he tenido muy presente durante los Mundiales, a Víctor Cabedo. Allí donde esté, esta victoria es suya», señaló Contador en declaraciones facilitadas por su departamento de prensa.
El madrileño reconoció su «esfuerzo máximo» para lograr el triunfo en la histórica carrera italiana. «Joaquim (Rodríguez) ha cogido unos metros y me he puesto a tirar, he podido cogerle, he tomado un poquito de aire a rueda y he probado», explicaba un Contador «muy, muy contento por ganar, especialmente por hacerlo en Italia».
«Hoy por la mañana, cuando me he levantado, pesaba 2,4 kilos más que en la Vuelta, sabía que eran 190 kilómetros, que ayer no había entrenado y que antes de ayer sólo había hecho 40 kilómetros, pero la cuestión era llegar al final con fuerzas en las piernas», relató el pinteño antes de cerrar su temporada el próximo sábado en el Giro de Lombardia. «Ahora lo que necesito es descansar y comer bien», zanjó.