No tuvo la trascendencia de la del viernes pasado en el Bernabéu, faltaría más, pero el Atlético volvió a alzar un trofeo al viento en Singapur, la Peter Lim Charity Cup, poniendo punto y final a una gira que ha tenido mucho de turismo y muy poco de fútbol. Los rojiblancos se impusieron a los animosos jugadores del Singapur Selection por 0-2, con tantos anotados por Raúl García y Diego Costa.
Ni el césped artificial ni la sensación térmica, por mucho que fuera bastante menor a la de días anteriores, impidieron un nuevo triunfo atlético ante unos animosos jugadores locales que incluso metieron la pierna más de lo que debían en un encuentro amistoso como éste. Precisamente una dura entrada fue recriminada por Gabi, que se convirtió desde ese momento ene el único rojiblanco que recibió pitos cuando tocó el balón.
Bajo la atenta mirada desde el palco de Tony Tan, presidente de Singapur, que recibió una camista del Atlético con el número 7, el de Adrián, el choque sirvió para ver de nuevo la calidad de Oliver Torres, una vez más el mejor de los madrileños, y también la de su compañero Saúl, que fue quien le regaló en el primer tiempo el gol a Raúl García, que fusiló casi desde el punto de penalti.
En la última media hora Simeone puso sobre el terreno de juego a la mayoría de los jugadores que estaban cinco días atrás en el césped del Bernabéu y el Atlético encerró a los locales en su área. Costa, que anotó el segundo, incluso pudo hacer doblete de no fallar un mano a mano con el portero local.
La expedición colchonera llegará en la mañana del jueves a Madrid, tras pasar por Barcelona, para comenzar a preparar su partido del próximo domingo ante el Real Mallorca.
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