El Bayern de Múnich se ha colocado como nuevo líder de la Bundesliga tras empatar a domicilio ante el Bayer Leverkusen (1-1), después de haber aprovechado la derrota del Borussia Dormtund frente al Moenchengladbach (2-0), en partidos de la octava jornada del campeonato doméstico.
El equipo de Pep Guardiola, que mereció mejor suerte, se adelantó con un tanto de Toni Kroos a la media hora, pero,sólo un minuto después, el local Sidney Sam estableció las tablas. Aún así, el punto es suficiente para que los muniqueses se alcen a lo más alto de la Bundesliga.
Por su parte, el Borussia de Dortmund, que visitaba el campo del Moenchengladbach, sufrió la primera derrota de temporada (2-0) en un encuentro que se resolvió en los diez minutos finales.
Kruse adelantó al Gladbach tras anotar un penalti provocado por Hummels, que dejó al Dortmund con 10, y Araújo se encargó de cerrar el marcador de un partido que sirvió para sumar la cuarta victoria para los locales.
Este resultado supone la segunda derrota de la temporada, tras la que encajaron ante el Nápoles, para los de Jurgen Klopp, y se quedan en segunda posición, por detras del Bayern, mientras que el Gladbach sube hasta la cuarta plaza que le metería en Europa la próxima campaña.
Por su parte, el Schalke 04 logró una cómoda victoria ante el Augsburgo (4-1) en un encuentro en el que los visitantes activaron las alarmas de Gelsenkirchen tras el tanto de Mölders en el minuto 11. Boateng en el 16 y Szalai en el 28 dieron la vuelta a un partido que sentenciaron en la segunda mitad gracias al segundo gol del jugador húngaro y al tanto final de Meyer.
Mientras, Stuttgart y Werder Bremen (1-1) firmaron las tablas tras un partido muy igualado, al igual que el Mainz y el Hoffenheim (2-2), en el que los locales arrebataron los tres puntos de sus rivales gracias a dos goles anotados en los diez minutos finales.
Por otro lado, el Eintracht derrotó a domicilio a un Wolfsburgo (0-2) que no pudo remontar el gol inicial de Bellarabi y que acabó pagando el riesgo que corrió al buscar el empate en el 86, cuando Kumbela marcó la sentencia.