A sus 22 años recién cumplidos, Courtois ya lleva más Trofeos Zamora que el mismísimo Iker Casillas. Tal vez, ha tenido la suerte de jugar en un equipo que defiende como los ángeles y guarda mucho el sitio, pero todo el mundo tiene que reconocer que el potero rojiblanco tiene la flor de los grandes.
Además, se mueve como pez en el agua fuera de los terrenos de juego. Su perfecto español le ha ayudado a meterse en el bolsillo a su afición y a hablar bien claro siempre que se le pregunta. Pese a su juventud, no solo tiene personalidad dentro del campo, también fuera. Lleva tiempo presionando al Chelsea para que no le deje en su plantilla o para que se cargue a Petr Cech. Algo impropio de su edad, pero sabe que tiene la sartén por el mango. Es el portero más prometedor del mundo. Realidad y futuro.
No obstante en su última entrevista, concedida a Sport Bild el guardameta ha ido un poco más allá: «Los aficionados del Atlético y mis compañeros no me ven como un jugador cedido. No tengo nada emocional que me una con el Chelsea. Ellos solo me ficharon por 9 millones de euros en 2011 y solo he ido a Londres para pasar reconocimientos médicos», aseguró el cancerbero que sabe que Mourinho le elogió tras las semifinales con un objetivo claro.
En cualquier caso, Courtois tiene pocas esperanzas de seguir un año más en el Calderón: «Ya el año pasado no me querían volver a ceder, pero quería quedarme en el Atlético. Todo empezará de cero a partir de la próxima temporada y será difícil llegar a una decisión satisfactoria», sentenció.
Asimismo, Courtois es coherente en todas sus declaraciones sobre el tema. «Tengo un gran respeto por Petr Cech. Es uno de los mejores porteros del mundo, así que creo que ponernos a los dos en el mismo equipo no sería lo más saludable del mundo. Los dos queremos jugarlo todo. Ninguno estaría feliz jugando tan solo la Copa de la Liga o la Copa de Inglaterra», aseguró en una entrevista a la BBC.