La Policía ha dispersado con gas lacrimógeno y cañones de agua a los manifestantes que han rodeado el estadio de Castelao, en la ciudad de Fortaleza, donde este martes se disputa el partido que enfrenta a las selecciones de Brasil y México en el Mundial de fútbol.
Al parecer, manifestantes con máscaras han intentado bloquear la principal vía de acceso al estadio y han lanzado piedras y palos contra los autobuses de la FIFA que intentaban entrar al Castelao.
Las unidades antidisturbios de la Policía de Fortaleza han intervenido, incluso con un vehículo blindado, y han usado gas lacrimógeno y cañones de agua para dispersarlos. El portavoz de la Policía de Fortaleza, Fernando Albano, ha informado a Reuters de que al menos diez personas han sido detenidas por los disturbios frente al Castelao.
A lo largo del último año se han producido múltiples manifestaciones contra el excesivo gasto público y la corrupción que ha supuesto la organización de este Mundial de fútbol y los Juegos Olímpicos de 2016 en Río de Janeiro.