El corredor André Greipel (Lotto-Soudal) se ha impuesto este jueves al sprint en la sexta etapa del Giro de Italia, transcurrida entre Montecatini Terme y Castiglione Della Pescaia sobre 183 kilómetros, con una clara superioridad y haciendo bueno el trabajo de su equipo para acabar con una larga fuga de cinco integrantes que no tuvo sus frutos, mientras que Alberto Contador (Tinkoff-Saxo) sigue con la 'maglia rosa'.
Greipel impuso su superioridad al sprint en esta bella localidad de la Toscana dejando sin opciones de triunfo al resto de velocistas, con Pelucchi y Modolo tras él. La llegada a meta fue toda una batalla con el cuchillo entre los dientes por parte de Orica, Lotto-Soudal, Lampre o Giant para colocar a sus sprinters, lo que provocó una montonera que afectó a muchos corredores, entre ellos Contador, aunque sin consecuencias para el líder.
Las pruebas médicas determinarán si sigue en carrera
El manager general del Tinkoff Saxo, Stefano Feltrin, ha comentado este jueves tras la caída de su ciclista Alberto Contador en la montonera producida al final de la sexta etapa del Giro de Italia que el de Pinto está siendo tratado con hielo «por precaución» y sometido a pruebas médicas pero que deberá ser evaluado de nuevo el viernes por la mañana, aquejado de su hombro y rodilla izquierdos, para saber si podrá seguir en carrera y defender la 'maglia rosa' que viste.
«Estamos evaluando la naturaleza de las lesiones de Alberto con el doctor del equipo. De momento está siendo tratado con hielo como precaución. Necesitaremos ver su estado y condición el viernes por la mañana«, aseguró Feltrin en declaraciones facilitadas por el Giro de Italia.
Contador se vio involucrado en una caída masiva producida este jueves a escasos 200 metros de la meta en Castiglione della Pescaia, tras una etapa de 183 kilómetros con inicio en Montecatini Terme. Pese a que entró en la línea de meta por su propio pie, sorprendió verle muy dolido en la ceremonia del podio.
El de Pinto no pudo ni vestirse la 'maglia rosa', con el brazo izquierdo inmóvil y tieso, rechazó abrir la botella de champán que abrió con gusto el miércoles al ponerse líder y, pese a estar atento con las azafatas, apenas pudo festejar el seguir líder y pidió que no le tocaran.
Además, llevaba hielo en ambas rodillas, algo confirmado a posterior por Feltrin. El español, evaluado por el médico del Tinkoff Saxo, y sometido a pruebas médicas y radiografías, podría tener afectado su hombro izquierdo si bien todavía no hay parte médico. De todos modos, según su manager general, será su evolución la que marque si puede seguir defendiendo esa 'maglia rosa'.