Los dos tenistas más laureados en la actualidad, Roger Federer y Rafael Nadal, se han pronunciado respecto al asunto del dopaje en el tenis, un tema delicado que cada vez se debate con mayor frecuencia. Ambos se muestran partidarios de que se produzca un aumento de los controles que refleje la limpieza, o no, del deporte de la raqueta.
Federer cree que “están intentando hacer lo máximo posible”, pero que aún se puede hacer más. El suizo ha hecho hincapié sobre todo en la ausencia de controles en las últimas rondas: “Cada vez que llegas a los cuartos de final de un torneo, cuando hay más puntos y dinero, deberías saber que te van a hacer un control”. Más en una final, como él mismo admite: “Siempre me sorprendo cuando salgo de la pista después de una final y digo: '¿Dónde está el control antidopaje'?
Otra forma de “asustar a la gente” cree que es realizar controles durante un tiempo más prolongado: “no sólo semanas y meses, estoy hablando de años, soy partidario de ello”.
Nadal considera que “el tenis es un deporte rico” y que “la gente necesita estar segura de que el deporte está limpio”. El español fue más allá y explicó la solución a un posible problema económico: “Los jugadores necesitan estar seguros y tener confianza en la gente que dirige el deporte para que esté limpio al cien por cien. No me importa si tenemos que poner dinero de los premios”. Además abogó porque se hagan públicos estos controles, con el fin de que el público sea consciente de ellos.
No ha habido muchos casos de dopaje, o al menos no se han hecho oficiales. Entre los más famosos se encuentra el de Mariano Puerta, que dio positivo en efinedrina después de haber alcanzado la final de Roland Garros en 2005, donde cedió ante el balear. Hay otros casos más recientes como los de Victor Troicki, suspendido 18 meses y que ya está de vuelta en el circuito. O el de Marin Cilic, que fue suspendido nueve meses por dar positivio en niketamida. Después conquistaría su primer y único grand slam en Nueva York el pasado año.
Uno de los casos que coge más de cerca a España es el de Nuria Llagostera, que a sus 33 años dio positivo por metanfetamina en un torneo en Standford. La tenista decidió retirarse del circuito debido a su edad, como Mario Ancic o Ryan Newport, a los que se les detectó alguna sustancia prohibida y ya atravesaban sus últimos años en el circuito.