-¿Qué balance haría del año 2015?
-Ha sido un año positivo, con momentos buenos y malos, pero saco una buena lectura de ambos. De los buenos, para seguir esa línea el próximo año y, de los malos, para corregirlos.
-¿Qué ha cambiado respecto al año pasado?
-Tengo un poco más de madurez, de conciencia, de regularidad, de tomar mejores decisiones según en qué momento…
-Desde el 2001 ninguna española pisaba el Top Ten. ¿Qué sintió tras alcanzar ese objetivo?
-Mucha alegría, es un sueño hecho realidad. Es algo positivo para el tenis femenino. Disfruté mucho ese momento.
-No ha podido acabar entre las diez mejores debido a una segunda mitad del año algo irregular. ¿Fue culpa del cansancio o algo mental?
-Ambas, Aunque el esfuerzo es sobre todo mental, ya que físicamente te puedes recuperar. Toda esa exigencia me paso factura de cara a lo que fue verano y el final de temporada.
«Me dio mucha rabia perder en Roma»
-No ganar un título supongo que también fue un objetivo fallido, sobre todo después de tantas finales.
-Es una espinita que se me ha quedado clavada en este 2015, pero he podido disputar tres finales con rivales de primer nivel en todas ellas. A ver si en 2016 consigo el objetivo.
-¿Qué final le dolió más perder, Miami, Roma o el dobles de la Copa de Maestras?
-Duelen todas. Pero la que más pude pelear fue la de Roma. Lo di todo, me entregue física y mentalmente, pero Sharapova es una jugadora que sabe sufrir mucho y competir al límite. Yo en el tercer set estaba sin energías.
«El evento de Zuhai está mal ubicado»
-Disputó el torneo de Zuhai, una 'segunda' Copa de Maestras. ¿No cree que debería cambiar el formato?
-Es un torneo que está mal ubicado. El planteamiento de los puntos no es positivo, porque las jugadoras que se han ganado estar entre las ocho mejores del año en ningún momento tienen que verse rebasadas por alguna que haya ganado en Zuhai. Es interesante para el espectador, o para la WTA porque se mueve dinero, pero a las jugadoras nos perjudica porque es una semana más.
-Los Juegos Olímpicos de Río, ¿es su cita más importante en el 2016?
-No, para nada. En mi casa hay muchos torneos importantes antes de la Olimpiada. Sin ir más lejos, hay tres Grand Slam. Es un evento especial, es cada cuatro años y hace mucha ilusión, pero no es uno de los objetivos prioritarios del curso.
-Va a competir en dobles junto a Garbiñe, ¿cree que tienen opciones de conseguir una medalla?
-Queremos intentarlo. Hemos jugado dos últimos años de cara a estos Juegos Olímpicos. Vamos a jugar por España y nos hace especial ilusión, pero también tenemos un año complicado por delante y habrá que saber gestionar bien en cada momento el hecho de poder jugar el dobles juntas.
-¿Ve a Garbiñe como número uno en el futuro?
-Hay más candidatas, pero tiene mucho potencial para serlo.
«No tengo en mente competir en el dobles mixto»
-¿Tiene pensado competir en la modalidad de dobles mixtos?
-No. Es una semana complicada y disputar tres modalidades no es fácil. No lo tengo en mente, pero si la capitana me elige, yo encantada.
-Paula Badosa es una de las jóvenes más prometedoras. La conoce muy bien. ¿La ve entre las mejores en unos años?
-Sí, tiene muy buen tenis y mucho potencial, pero hay que tener paciencia, a veces en este país se peca un poco de querer ir más rápido de lo que se debe. Pero doy fe de que puede hacer grandes cosas en el futuro.
-Ambas comparten entrenador: Xavier Budó, ¿hasta qué punto le ha ayudado a llegar donde está ahora?
-Es un pilar muy importante en mi proyecto. Sabe cómo expresarse en cada momento, cómo hacerme llegar las mejoras en mi juego y también a nivel personal y mental. Llevo 8 años con él y eso dice de lo importante que es para mí. Se lo toma con ilusión y está muy implicado. Es de valorar.
-Serena Williams ha arrasado en 2015. ¿Está por encima del resto?
-Está un nivel por encima, sí. Sabemos de la agresividad en su juego. Ha demostrado durante muchos años ser la número uno y es la favorita de cara al año que viene.
«Rafa siempre ha sido un gran competidor»
-¿Qué opina de las exhibiciones que se disputan a final de año? ¿No cree que impiden descansar el tiempo necesario?
-Estamos obligadas a jugar de enero a octubre o noviembre. En esta época que tenemos de descanso podemos elegir cómo encarar la pretemporada. Hay gente que al competir o disputar exhibiciones se siente mejor. Otras prefieren quedarse en casa y trabajar más físicamente, pero no creo que perjudique.
-Como aficionada y profesional de este deporte, ¿cree que Nadal aún podrá ganar más Grand Slam?
-Sí, yo creo que está trabajando para ello. Él es consciente de lo que le ha pasado este año y de las mejoras que necesita. Rafa siempre ha sido un gran competidor. Me gustaría porque creo que todavía tiene tenis para ello y posee esa capacidad.