Estados Unidos se encuentra todavía en Houston, cuando faltan solo cuatro días para la ceremonia de inauguración de Río de Janeiro 2016. El Dream Team juega el próximo día 2 su último amistoso frente a Nigeria antes de marchar hacia tierras brasileñas, donde debuta el próximo 7 de agosto frente a China.
Todo va como la seda en su concentración y cuentan los cuatro partidos de preparación que han jugado hasta este momento por palizas descomunales, pero el único aspecto negativo en el equipo se encuentra en el apartado extradeportivo. De hecho, Draymond Green ha protagonizado un escándalo en las redes sociales debido a su poca pericia con el uso de las nuevas tecnologías.
El alero de Golden State Warriors publicó una imagen de su pene a la vista de todo el mundo en su perfil de Snapchat. La imagen corrió como la pólvora por internet, aunque el jugador se dio cuenta diez minutos después y decidió eliminar la imagen rápidamente.
En un principio, decidió echar la culpa de todo lo sucedido a un hacker con un mensaje que transmitió por todas sus redes sociales, pero finalmente tuvo que reconocer que se había equivocado y pidió perdón a todos sus fans por lo sucedido.
Hacked….. Can't win right now
— Draymond Green (@Money23Green) 31 de julio de 2016
“Pido disculpas. No quería hacerlo. Pensaba que se trataba de un mensaje privado. Me equivoqué de botón. Todos estamos a un solo click de publicar algo en un sitio equivocado. Eso es lo que me ha pasado”, explicó Green a la prensa presente en Houston.
Además, esta no es la primera vez que el escudero de Stephen Curry protagoniza un escándalo este verano, puesto que a comienzos de julio terminó detenido en Michigan. «Confirmamos que Draymond Green fue arrestado por asalto en nuestro distrito financiero el domingo de madrugada alrededor de las 2:30. La víctima era un hombre. Básicamente fue un altercado entre dos tipos. No hubo heridos. Fue liberado con una fianza de 200 dólares”, explicó la Policía en un comunicado.
Anteriormente, la mala cabeza de Green ya le había jugado malas pasadas en dentro de las canchas. Sufrió una polémica sanción de un partido de suspensión tras un enganchón con LeBron en las Finales. Asimismo, también propinó una patada en sus partes a Steve Adams.
Felipe Poza