Este viernes arrancan los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, donde España estará representada por 305 deportistas. Pese a la complejidad que implica una cita de semejante calibre, esta edición se presenta como una de las mejores oportunidades para que España pulverice el récord de medallas cosechadas en unos Juegos: los 22 metales conquistados en Barcelona 1992. Muchas de esas opciones están aún en el aire, pero hay nombres que emergen con la suficiente fuerza como para garantizar que contribuirán a ese palmarés. La ausencia de Rusia en algunas disciplinas acrecienta las expectativas de muchos de los nuestros.
Mireia Belmonte: La nadadora catalana es un valor seguro para embolsarse no uno, si no dos metales. Su ausencia en los Mundiales de Kazán la han restado algo de protagonismo, pero no debería tener problemas en los 200 mariposa y los 400 estilos. Además, su gran capacidad de resistencia la hace peligrosa en los 800 metros, donde en Londres sorprendió con la plata.
Mario Mola: La prueba de triatlón podría haber deparado también más de una medalla, pero la inoportuna lesión de Gómez Noya ha dejado al mallorquín como única opción. Mola encabeza la clasificación de la Copa del Mundo y tiene vía libre al bronce. No se descarta el oro, aunque tendrá que pugnar con los hermanos Brownlee.
Carolina Marín: Se encuentra ante el último gran reto de su carrera pese a su juventud. Ha saboreado lo que es alcanzar la cima del ranking en el circuito de Bádminton, y se ha aupado como campeona del Mundo (en dos ocasiones) y de Europa. Parte como principal candidata al oro, siempre con la china Li Xuerui como principal opositora.
Orlando Ortega: El cubano, recientemente nacionalizado español, es un valor seguro para ascender al primer escalón del podio en los 110 metros vallas. Llega tras marcar el récord de España y contará con una ventaja: ninguno de los últimos tres medallistas en su modalidad estará en Brasil.
Miguel Ángel López: Es el hombre que más rinde en las trayectorias más longevas. Nadie parte con su cartel en los 20 kilómetros marcha. Es campeón Mundial y Europeo y espera batir un nuevo récord en Brasil. También lo intentará por primera vez en los 50 km.
Ruth Beitia: La cántabra ha ofrecido alegrías al deporte español durante casi una década en salto de altura. Nunca se ha acomplejado en las grandes citas y las bajas de las rusas Kuchina y Chicherova hacen más difícil que eso suceda.
Alberto Fernández: El tiro es uno de los deportes más desconocidos en el panorama español, pese a que un puñado de nuestros deportistas optan a conseguir un metal. El más seguro es el del madrileño, número uno en el ranking mundial de foso.
Saúl Craviotto: Su reinado comenzó hace ya ocho años, en Pekín, donde se alzó con el oro. En Londres tuvo que conformarse con la segunda plaza, y ahora de nuevo es candidato a todo. Podría ampliar su medallero en la prueba de piragüismo de K2-200 en la que competirá junto a su compatriota Cristian Toro.
Maialen Chourraut: El piragüismo será otra mina de medallas para España. La vasca, bronce hace cuatro años, es favorita en todas las encuestas para colarse en el podio. El oro tampoco está descartado.
Eva Calvo: Pocas dudas hay entorno a la madrileña. Es la segunda mejor del mundo en taekwondo en su peso (57 kilogramos), como ha demostrado a lo largo del 2016, y tiene el metal más cerca que nunca.
Alberto Puente