martes, octubre 1, 2024
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El desesperado oro olímpico de Shaunae Miller

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En los Juegos de Río 2016 tanto la final masculina como la femenina de 400 metros han dado más sorpresas de lo normal. En la competición masculina, el atleta sudafricano Wayde van Niekerk’s batió el récord mundial de Michael Johnson al terminar la carrera con un tiempo de 40,03 segundos. La final femenina tampoco decepcionó en cuanto a emoción ya que Shaunae Miller se ganó el oro al ‘tirarse a la piscina’ y venció a la veterana Allyson Felix.

La joven bahameña de 21 años fue de las mejores en salir y mantuvo un buen ritmo a lo largo de la carrera. Sin embargo, la estadounidense y ganadora de cuatro medallas olímpicas en los 400 metros, Allyson Felix, no se había dado por vencida y en cada zancada recortaba metros a la joven atleta, que prácticamente se había quedado sin fuerzas. Fue en estos momentos de desesperación cuando Miller, en la línea de meta, decidió lanzarse al vacío con la intención de que su cuerpo llegara donde no lo hacían sus piernas.

Tras su “caída suicida”, Miller se quedó en el suelo sin saber qué hacer o qué pensar. Lo único que sabía es que había hecho la carrera de su vida. Solo cuando su madre le gritó desde las gradas “¡Levántate!, ¡Levántate”, supo que había ganado el oro.

La desesperación de la joven atleta le dio la victoria con un tiempo de 49,44, el mejor registro de su vida y le arrebató a la americana Felix la opción de convertirse en la primera atleta en conseguir cinco medallas de oro olímpicas al cerrar la vuelta en 49,51 segundos. La jamaicana Shericka Jackson acabó tercera con un tiempo de 48,85 segundos.

El gesto de esta atleta ha provocado la división y el enfado en las redes sociales de muchos usuarios que no consideran legal la actuación. A pesar de esto, el reglamento de la carrera es claro: “El primer atleta cuyo torso, independientemente de la cabeza, cuello, brazos, piernas, manos o pies, alcance la línea de meta es el ganador”. Y así lo mostró la ‘photo finish’: el pecho de la atleta de 21 años cruzaba antes la meta que el de la estadounidense.

En los Juegos de Londres, Miller se quedó a las puertas y no consiguió pasar de la primera serie. Sin embargo, cuatro años después la joven ha conseguido imponerse ante una de las mejores atletas de los últimos años, Allyson Felix, que en ningún momento se le pasó por la cabeza que su competidora se lanzaría al vacío.

Andrea Morea

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