«Madrid sigue teniendo todas las infraestructuras necesarias preparadas y listas. Todas. ¡Claro que debería ir a una cuarta candiatura a los JJ.OO. en el año 2028 o en el 2032! Pero hoy no veo a ningún político con carisma para liderarla», ha manifestado esa mañana Alejandro Blanco, presidente de Comité Olímpico Español (COE), en los Desayunos de Babelia, que organiza el foro periodístico The Experience Club perteneciente a Madrid Foro Empresarial (MFE).
Todavía con el orgullo, y el regusto, de los resultados de los equipos españoles en Río 2016, Blanco reclama «un mayor esfuerzo institucional, político y económico» para nuestro deporte olímpico. Diecisiete medallas en la última cita olímpica (7 de oro, 4 de plata y 6 bronces) son, para él, «un milagro» ante el raquítico presupuesto que les llega. «Otros países tienen ocho o diez veces más, como mínimo pero, pese a todo, ahí están nuestros resultados»,ha dicho. Y un dato esclarecedor: «En 2015 el dinero en euros fue el equivalente en pesetas al de 1986», recuerda.
A su juicio, la sombra de Barcelona sigue siendo muy alargada, para bien. Pero eso determina un «pacto no escrito» en el cambio y la rotación de continentes a la hora de elegir país candidato independientemente de si se han hecho o no los deberes. Alejandro Blanco lo sabe y lo repite hasta la saciedad porque ha sido el caso de Madrid en, al menos, dos ocasiones: instalaciones listas, sueño olímpico al garete.
El presidente del COE, por ello, echa en falta políticos que se empeñen, se ilusionen y se impliquen. Recuerda, por ejemplo, a dos alcaldes madrileños: José María Álvarez del Manzano y a Alberto Ruiz Galllardón. «Todos sabemos -dice- que la candidatura olímpica la pide el ayuntamiento de turno y el Gobierno central es quien la que la garantiza» para añadir, de inmediato, que «hasta el momento no ha habido ningún contacto con la alcaldesa Manuela Carmena». Tampoco ello coge por sorpresa a nadie, especialmente a los deportistas, sabido el nulo entusiasmo de equipo de Ahora Madrid por los Juegos de Río de Janeiro.
Alejandro Blanco aboga por una ley orgánica para cambiar de modelo de gestión en el deporte olímpico, «algo que no facilita la actual situación política», confiesa. «Una norma común -asegura- que propicie una adecuada financiación y que la programe con todas las garantías. Y que, además de aumentar el presupuesto, las empresas puedan distribuir con transparencia ese dinero a los deportes». Lo que no es de recibo, a su juicio, es que muchos deportistas olímpicos tengan que pagarse su carrera; o ellos o sus familiares. «Incluso, como en otros tantos casos, son empresas, clubes, y organizaciones modestas las que contribuyen a la formación de los deportistas sin pedir, ni recibir, nada a cambio», explica el responsable olímpico.
¿Se ha criticado que la Casa Real no acudiera a Río de Janeiro?. Blanco no duda del «apoyo institucional de la Monarquía» hacia el olimpismo. Es más, insiste en que «Felipe VI es el gran abanderado y el mejor referente. No sé porqué no habrá estado allí pero tanto él como la Reina han estado informados de todo y en todo momento porque así nos lo pedían. Además, se preocupaban tanto de los deportistas que ganaban como de los que no».
¿Ha habido algún momento delicado en Río 2016 por ideología separatista? La respuesta de Blanco ha sido un «no» rotundo. «Todos nos sentíamos orgullosos de ser españoles. En el COE todos representamos a España. Cuando ha sonado el himno y ha subido la bandera, lloraba todo el mundo».
José Casanate