Nick Kyrgios no deja indiferente a nadie. El tenista australiano todavía tiene mucho futuro por delante, pero a sus 21 años da la sensación de que es uno de los talentos más desaprovechados del circuito. Ocupa la posición número 14 en el ránking ATP, pero tiene condiciones para llegar mucho más arriba, aunque su mala cabeza le impide competir como haría cualquier otro en su lugar.
Sus continuos líos con los árbitros, su escandalosa polémica con Wawrinka o su dejadez en algunos partidos le han llevado a protagonizar muchos espacios en los telenoticias de todo el mundo. Sin embargo, la gota que colmó el vaso de la paciencia de los directores de la ATP llegó la pasada semana, en pleno Master de Shanghái, donde se dejó ganar descaradamente en su encuentro frente a Mischa Zverev.
Jugó sin ninguna tensión los puntos y en ocasiones se fue a la silla antes de que su rival finalizase los puntos. Además, se encaró con el público que había pagado la entrada para ver el partido porque le recriminaban su poco interés en el partido. «¿Quieres salir tú y jugar? ¡Siéntate, cállate la boca y mira!», llegó a decirle un aficionado. Además, durante el partido el juez de silla también le pidió explicaciones. «Nick, no puedes jugar así, no es profesional. Este es un torneo profesional», le recriminó el árbitro. «¿Puedes decir ya 'Time', para que pueda acabar ya este partido e irme a casa?», contestó Kyrgios sin ningún tipo de complejos.
Se intenta justificar con el calendario
Por todo esto, la ATP le impuso una sanción de ocho semanas que se extendería hasta el 15 de enero de 2017, con una multa añadida de 25.000 dólares. No obstante, el organismo dio al tenista la posibilidad de reducir el castigo a tres semanas, si accedía a acudir a un psicólogo. El australiano ha decidido hacer caso a esa recomendación y de esta forma podrá volver a competir el próximo 7 de noviembre, aunque a partir de ese momento, con la cercanía de las vacaciones, no tendrá grandes partidos por jugar.
Así las cosas, Kyrgios ha decidido dejarse de bromas y expresar su arrepentimiento en un comunicado. “Tras la decisión de la ATP de hoy, me gustaría aprovechar esta oportunidad para disculparme de nuevo por las circunstancias en Shanghái. La temporada ha sido larga, ya que he luchado contra diferentes lesiones y he tenido otros desafíos durante el final del verano”, explicó el joven para justificarse.
En cualquier caso, el australiano ha escudarse en el duro calendario para justificar su actitud, a pesar de que muchos jugadores disputan más partidos que él a lo largo del año y a ninguno se le ocurre hacer nada parecido. “La gira asiática ha sido especialmente dura después de la semana y el triunfo en Tokio. Con el viaje a través de todo el continente, mi cuerpo, tanto física como mentalmente, dijo basta en Shanghái. Esto no es una excusa, y sé muy bien que tengo que pedir disculpas a los aficionados de Shanghái y de otras partes del mundo, así como a la organización del torneo de China, que hacen un trabajo increíble”.
Felipe Poza