El longevo mandato de José María Odriozola (27 años) pondrá punto y final el próximo día 29 de noviembre, cuando de forma oficial Raúl Chapado tome el relevo. El abulense, plusmarquista español en triple salto de altura en pista cubierta, se impuso de forma contundente (105-48) a su rival Isidoro Hornillos, y presidirá la Federación Española de Atletismo los próximos cuatro años.
Odriozola, algunas luces y muchas sombras
El pontevedrés asumió el cargo de Presidente de la Federación Española de Atletismo hace casi tres décadas. Por aquel entonces, su gestión arrancó con el respaldo y la ilusión de los afines a este deporte. Odriozola aprovechó los numerosos recursos que se le otorgaron con motivo de los Juegos Olímpicos de Barcelona, y modernizó esta disciplina, en la que coincidió con los últimos éxitos de José Luis González, José Manuel Abascal o Javier Moracho.
Sin embargo, la generación que creció con él se vio salpicada por el dopaje, como han sido los casos de Alberto García, Julio Rey, Paquillo Fernández, o el más sonado de Marta Domínguez. Este asunto fue el que más de cerca le tocó, pues Odriozola tuvo que lidiar con la figura de Eufemiano Fuentes y con el caso de su esposa, Cristina Pérez, donde se mostró muy poco claro. Su obsesión por controlar todo, pues se puso también al frente del Comité Técnico de la Federación, propició numerosas críticas. Una etapa que ha concluido después de que haya renunciado a presentarse como candidato.
Chapado toma el relevo
Su sucesor será el abulense, plusmarquista español de triple salto en pista cubierta, que antes de la votación reiteró que el objetivo era pensar en un “modelo de gestión para el futuro”. “Mi misión, si resulto elegido, será la de ser un director de orquesta, sabiendo que el talento y el trabajo es de los que estáis aquí sentados. Tenemos que trabajar unidos en este proyecto de futuro, incluso desde la discrepancia. Entre gente que ama el atletismo como nosotros siempre habrá puntos de encuentro”, comentó en un afán por ceder protagonismo a los atletas.
En el escrutinio apenas hubo emoción. Raúl Chapado recibió el apoyo de 105 de los 159 asambleístas que se dieron cita. 48 votos fueron para el otro candidato, Isidoro Hornillos. El resto, seis cartulinas en blanco y dos ausencias. Cuando el pontevedrés superó los 81 votos que le otorgaban la mayoría absoluta, Hornillos no dudó en felicitar y alzar el brazo de su rival.
Chapado, que el próximo día 29 será designado de forma oficial como presidente de la Federación mínimo hasta 2020, se mostró muy satisfecho tras un triunfo que esperaba: “El resultado era un poco lo previsible por los avales recibidos, pero quien tiene que ganar hoy es el atletismo español, no Raúl Chapado. Se me ha delegado una responsabilidad y quienes lo han hecho son mi gente, no les puedo fallar”.
Alberto Puente