Tras un polémico beso sin consentimiento a la futbolista Jenni Hermoso, Luis Rubiales, presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF), se ha disculpado públicamente.
Aunque tras el beso tachó las críticas de «gilipolleces», el escándalo generado le ha llevado a replantear su postura. «
«Seguramente me he equivocado, lo tengo que reconocer», ha dicho Rubiales en un vídeo difundido por la Federación.
«Estamos ante un hecho histórico, uno de los días más felices del fútbol español. Campeones del mundo, una barbaridad. Para esto llevamos trabajando mucho tiempo y nos sentimos orgullosos. Pero también hay un hecho que tengo que lamentar y es todo lo que ha ocurrido entre una jugadora y yo con una magnífica relación entre ambos y donde seguramente me he equivocado», expresó Rubiales en un vídeo publicado por la propia Federación.
«Fue sin mala fe en un momento de máxima efusividad. Aquí lo veíamos natural, pero fuera se ha formado un revuelo. Tengo que disculparme, aprender de esto y entender que cuando uno es presidente tiene que tener más cuidado».
Para finalizar, Rubiales subrayó la importancia de trabajo en los logros del equipo femenino, liderado por Jorge Vilda, y de no dejar que este incidente opacara las celebraciones merecidas.
Reacciones de varios ministros
El ministro de Deportes, Miquel Iceta, junto a otras figuras políticas como Irene Montero e Ione Belarra, había criticado el comportamiento de Rubiales, llegando a considerarlo «inaceptable». Montero y Belarra, pertenecientes a Podemos, lo describieron en las redes sociales como «una forma de violencia sexual» que muchas mujeres enfrentan a diario y que no puede ser normalizada.