El Valencia CF debía tomar una decisión sobre su futbolista, Rafa Mir, tras abrirse sobre él una investigación entorno a una presunta agresión sexual con detención incluida y haber quedado en libertad provisional el pasado miércoles. Así, el jugador seguirá ligado al club (cedido esta temporada por el Sevilla FC), aunque se mantendrá alejado de la disciplina del equipo. Por el momento, quedan atrás los rumores de un posible despido por parte del club.
Pero sí que se la va a imponer una multa económica y una sanción disciplinaria «desde el punto de vista del régimen sancionador aplicable al ámbito del fútbol profesional», como ha comunicado el Valencia tras abrirle un expediente. De esta forma, quedará apartado temporalmente de la dinámica del equipo, ya que no se ha especificado el tiempo concreto. El club entiende que el «modo de proceder, en su tiempo de descanso, afecta indiscutiblemente al rendimiento profesional que se espera de él como jugador de este Club; dañando, además, la confianza que nuestra afición tiene en todos sus jugadores». Mir ha acudido hoy a la Ciudad Deportiva de Paterna para reunirse con el club.
La decisión del Valencia ha sido actuar «dentro de sus competencias» y en el comunicado emitido se ha reiterado que «seguirá colaborando con la Justicia en todo aquello que ésta pueda requerir de nuestra parte».
Primeras palabras de Mir
La ‘resolución’ de la entidad valencianista y su manifestación sobre el asunto se ha producido pocas horas después de que el propio Mir ‘hablara’ por primera vez a través de un comunicado en sus redes sociales. En él, ha incidido en su inocencia, ante una denuncia que califica de «infundada» y su confianza en la Administración de la Justicia, al mismo tiempo que ha pedido disculpas al Valencia haciendo referencia a club, compañeros y afición. También ha indicado que por consejo de su abogado, trabajarán «en los tribunales y no en los medios de comunicación o redes sociales».