El equipo blanco, que ganó 98-84 al Alba Berlín, llegó a ir 11 puntos abajo en el marcador en el segundo cuarto. Musa, Rathan Mayes y Campazzo los más destacados.
El Real Madrid sigue dejando muchas dudas con su juego en Euroliga, pero lo importante ayer era ganar y el equipo lo hizo. Los blancos empezaron el partido con una marcha menos, y esto hizo que el Alba Berlín le sacase una ventaja de 11 puntos en el segundo cuarto.
Y es que la primera parte del Madrid fue bastante mala, pero nada diferente a lo que este equipo acostumbra en Euroliga. Llegó a estar 26-37 abajo, hasta que Abalde, de lo poco destacable de los madrileños en el primer periodo, volvió a meter al equipo en el partido a base de lanzamientos de tres. En la defensa tampoco se vio una gran mejoría respecto a las últimas derrotas y dio vida a un equipo que ahora mismo es colista de la competición con solo dos victorias y nueve derrotas.
Mejores sensaciones del Real Madrid tras el descanso
Tras el paso por vestuarios al que se fueron los dos equipos empatados a 55, Rathan-Mayes y Campazzo cogieron las riendas del equipo para evitar irse con un susto del Wizink Center. De esta manera, el Madrid le puso una velocidad más al partido y los blancos, para bienestar de sus aficionados, por fin no sufrieron en el último cuarto, siempre con una ventaja por encima de los 10 puntos y demostrando por qué el equipo alemán no ha conseguido vencerles en las últimas dos décadas.
Musa, errático durante gran parte del partido, estuvo mucho mejor en el tramo final del encuentro y acabó con 13 puntos. Por su parte Campazzo consiguió un doble-doble de 12 puntos y 10 asistencias.
De esta manera, el Real Madrid se va a la ventana de selecciones con victoria después de haber perdido 4 de los últimos 5 partidos de Euroliga, lo que le deja décimo en la clasificación, y coge así algo de confianza para visitar al Barcelona en el Palau Blaugrana el próximo jueves.
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