Knicks 117-114 Spurs
Exhibición total de NBA en el Madison Square Garden con Wembanyama y Mikal Bridges como protagonistas. El francés hizo 42 puntos y cogió 18 rebotes, mientras que el jugador de Knicks se fue hasta los 41 puntos para darle a su equipo la victoria. El gigante se San Antonio se quedó a dos puntos de igual el récord de mayor anotación de un jugador de Spurs en un partido de Navidad. Incluso llegó a meter el triple al final del partido, pero la canasta fue anulada por una falta previa a Chris Paul.
Los Knicks tuvieron que remar mucho al final del partido ya que se vieron casi todo el último cuarto por detrás en el marcador (6 puntos abajo a falta de 7 minutos), pero Mikal se puso la capa de superhéroe y metió 15 puntos en los últimos 12 minutos, incluso la canasta decisiva para alejarse en el luminoso. Hart fue el otro salvador, al coger los dos últimos rebotes defensivos que acababan con cualquier posibilidad de lograr la épica por parte del equipo visitante. Brunson estuvo demasiado fallón, pero por suerte su equipo no le necesitó.
Mavericks 99-105 Timberwolves
Las peores noticias para Dallas y no es la derrota. Y es que Doncic se volvió a lesionar cuando estaba haciendo un gran partido. Llevaba 14 puntos en 15 minutos, pero en una jugada él solo frenó, notó un dolor en la pierna izquierda y se fue a los vestuarios de donde ya no volvió. Según las primeras informaciones de la prensa estadounidense podría perderse varias semanas, lo que le arrebataría la opción de luchar por el MVP.
La lesión del esloveno dejó a su equipo muy tocado, y el conjunto de Minnesota llegó a ponerse a 28 puntos. Pero cuando el partido parecía ya totalmente decidido, los Mavs e Irving tiraron de orgullo con un parcial de 37-11 a su favor que les dejó a solo dos puntos con un minuto restante de juego. Aunque a partir de ahí tomaron las peores decisiones en esos últimos 60 segundos de partido y los Wolves supieron mantener la calma para llevarse la victoria.
Celtics 114-118 Sixers
Sin duda la mayor sorpresa de la noche la protagonizó el equipo de Philadelphia al ganar al campeón de la NBA en su propia cancha, y parece que por fin encuentran una buena noticia dentro de la temporada tan triste que están viviendo.
Maxey fue el líder de un conjunto que tuvo a un muy buen Embiid tras su polémica expulsión en el último partido.
Los Celtics cometieron infinidad de errores que los de Philly no dudaron en castigar, aunque a punto estuvieron de tirar por la borda el trabajo logrado durante todo el partido. Primero se fueron empate al último cuarto después de haber ido ganando por 16 puntos, y cuando volvieron a ponerse a 15, perdieron toda la ventaja a falta de dos minutos y estuvieron cerca de irse de Boston con las manos vacías. A pesar de eso, se mantuvieron firmes en los tiros libres del final para tumbar al que se supone que es el mejor equipo de la liga.
Warriors 113-115 Lakers
LeBron James tendrá 95 años y seguirá siendo uno de los mejores jugadores de la NBA. Y es que no hay explicación para lo de este jugador. Cuando se retire, el mundo del baloncesto realmente valorará lo que es haber estado 21 años a un nivel superlativo. Ayer en San Francisco anotó 31 puntos y repartió 10 asistencias para llevarse su undécima victoria en un partido de Navidad, ya es el que más tiene en la historia.
Pero hay que hablar de Curry también, porque regaló una exhibición en forma de 38 puntos, incluido el triple que empataba el partido a falta de 5 segundos.
Pero con todo esto, todos los focos anoche se los llevó Austin Reaves y no es para menos. El joven jugador de Lakers logró un triple-doble de 26-10-10 y la canasta sobre la bocina para regalar a su equipo un triunfo muy trabajado.
Esta victoria es muy importante para el cuadro de Los Angeles, ya que por fin vuelven a estar en las posiciones que dan acceso directo a los playoffs.
Suns 110-100 Nuggets
En el último partido de la jornada por fin se pudo ver a un Kevin Durant sano y salvo y a pleno rendimiento en un partido trascendente. El alero se fue a los 27 puntos aunque no estuvo muy bien desde la larga distancia, donde no anotó ni una sola canasta en los 5 intentos que tuvo.
El cuadro de Denver no estuvo fino, a pesar de que su gran estrella Jokic consiguió 25 tantos y 15 rebotes, pero en lo colectivo el equipo estuvo desaparecido. Solo Murray fue capaz de hacer más de tres asistencias, un claro indicador de los problemas que están sufriendo los de Colorado en esta temporada.
El tercer periodo fue claramente el que marcó la diferencia, ya que después de dos cuartos bastante igualados, lo Suns se fueron despegando y los Nuggets se quedaron en la lona. 15 puntos llegaron a separarles durante los últimos minutos, pero al final Denver pudo maquillar un poco el resultado y el público de Phoenix volvió a casa contento por Navidad.