Pinchazo del Real Madrid en Liga. Los de Ancelotti pierden tres puntos importantísimos que les habrían dado un colchón enorme de cara al derbi del próximo sábado ante el Atlético de Madrid, que ha ganado esta tarde al Mallorca en casa por 2-0.
Sin embargo, los blancos fueron incapaces de descifrar la clave para acabar con la doble línea defensiva que presentaba Manolo González en el terreno de juego, sobre todo en la primera parte, en la que el Real Madrid solo realizó tres remates. Al poco de empezar el encuentro, Rüdiger se lesionó y tuvo que ser sustituido por Asensio.
Además, en los primeros 45 minutos, Vinicius se adelantó con un latigazo al lateral de la red, pero el árbitro anuló el gol por una falta previa de Mbappé sobre un defensor perico.
Para poco más dio la primera parte. En cambio, tras el paso por vestuarios, los visitantes despertaron y empezaron a someter al Espanyol, que ya era incapaz de llegar a todas las ayudas como al principio.
Rodrygo tuvo una ocasión clarísima, pero el balón rozó el palo y a Joan García, héroe sin duda de la noche. El portero español dio un recital de paradas que mantuvo a su equipo vivo en el partido, con especial mención a una salvada con la yema de los dedos a un tiro de Mbappé que ya casi estaba celebrando.
Salió Modric para intentar abrir el marcador, pero fue el propio croata el que perdió un balón que propició una contra de libro, y tras un centro de Omar El Hilali, el balón le llegó a Carlos Romero, quien definió a la perfección para volver a ganar al Real Madrid después de bastante tiempo.
El Espanyol supo jugar con el cronómetro y desesperó al Madrid, que prácticamente no creó peligro en los últimos diez minutos.
Esta victoria saca al Espanyol del descenso, a la espera de lo que haga el Alavés. Por su parte, el Real Madrid ya solo le saca un punto al Atleti, que, ganando el derbi, volvería a ser líder.
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