La paliza que sufrió el Bayern de Múnich frente al Real Madrid en el Alianz Arena cambió por completo el panorama del fútbol mundial. El equipo bávaro parecía encaminado a marcar una década en el mundo del fútbol, pero la lección de fútbol fue de las mayores que se recuerdan en el fútbol europeo.
Estilos a un lado, el equipo que había ganado 7-0 al todopoderoso Barcelona perdió 5-0 contra el Real Madrid. Este hecho sirve para comparar el estado de forma en el que llegaron a los momentos decisivos en las dos temporadas y al menos en el apartado físico Jupp Heynckes sale mucho mejor parado.
Antes de que Guadiola perdiese el encuentro se sabia que si caía eliminado le caerían palos por todos los sitios, pero como siempre la realidad supera a la ficción. Al entrenador catalán que ganó la Bundesliga con la mayor antelación le quedan pocos apoyos en Múnich y no esta dispuesto a negociar para ganárselos.
Guardiola es un extremista de su propio estilo. No entiende que desde que es entrenador las formulas para contrarrestarlo han evolucionado más que su propio manual y que su futuro se repetirá si no lo enriquece en el futuro. No se entiende cómo el Bayern no disparó ni una vez desde fuera del área en el Bernabéu, al igual que no se entendía que no lo hicieran Messi o Xavi en su etapa en el Barcelona.
Sin embargo, él no está dispuesto a renunciar en lo más mínimo a sus ideas. «Es el club el que debe decidir si este entrenador con estas ideas es el mejor para este equipo. No es mi tema», declaró días después del fiasco en semifinales de la Champions League, en unas palabras que se interpretan como un claro pulso a la directiva.
Según Voz Populi, Guardiola espera que le dejen trabajar tranquilo o que le enseñen la puerta de salida. En cualquier caso, no le importaría demasiado verse fuera de Alemania. El entrenador más laureado del fútbol europeo en los últimos tiempos ya tiene una nueva novia.
De hecho, Pep estaría encantado de trabajar con la gente con la que más a gusto se sintió en su etapa como entrenador azulgrana. Txiki Begiristain ya se ha puesto en contacto con él para tentarle de cara a la próxima temporada porque Manuel Pellegrini también tendría una oferta muy tentadora para abandonar el banquillo de los ‘citizens’.
Además, en Manchester, Guardiola podría trabajar con más tranquilidad con gente que defiende su mismo estilo. No tendría las mismas presiones que en Alemania porque el director ejecutivo del club es el que fuera vicepresidente del Barcelona, Ferrán Soriano. Por todo esto, siempre que le preguntan por su posible destitución, él dice que no tiene inconveniente en irse.