Las fuentes de Neptuno y Cibeles serán protegidas con una valla perimetral en previsión de las celebraciones que tendrán lugar tras la final de la Liga de Campeones, que enfrentará al Real Madrid y al Atlético, a lo que se unirá que la Policía municipal establecerá filtros para impedir el paso a las plazas con botellas o cualquier otro elemento potencialmente peligroso.
La Junta de Gobierno, presidida por la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha diseñado el dispositivo de seguridad, en el que si el Real Madrid gana la Liga de Campeones lo celebrará con la afición el domingo 25 desde las 20 horas y si lo hace el Atlético será el lunes 26.
Tanto en un caso como en otro serán 260 agentes de la Policía municipal los que velarán por la seguridad en estas celebraciones posteriores.
La caravana merengue partirá del estadio Santiago Bernabéu para bajar por el paseo de la Castellana y el de Recoletos hasta la Plaza de Cibeles. De vuelta, el itinerario será al contrario. Habrá cortes de tráfico y desvíos a lo largo del trayecto al paso de la comitiva.
En el caso de que el Atlético de Madrid gane la final de Lisboa, el equipo rojiblanco lo festejará con sus aficionados el lunes con una ruta que comenzará en el Vicente Calderón y que continuará por el paseo de los Melancólicos, Pirámides, paseo de las Acacias, glorieta de Embajadores, ronda de Valencia, ronda de Atocha, glorieta del Emperador, Carlos V, paseo del Prado, plaza de Cánovas del Castillo y a la inversa en la vuelta.
Quedará además prohibido el estacionamiento en el aparcamiento de superficie de la plaza de Neptuno.