El Mundial de Brasil va camino de convertirse en el más desastroso de todos los tiempos. La canarinha se concentra en medio de protestas en torno a la educación y a la sanidad. Los jugadores escuchan gritos como “Neymar no vale más que un maestro” en su concentración, mientras que los indios brasileños también se quejan porque les han robado su espacio.
Además, la figura visible del Mundial de Fútbol también se ha puesto en contra de los organizadores. Ronaldo se siente “avergonzado” por la “incapacidad” de su país para terminar las obras de los estadios a tiempo. De hecho, ‘O Fenómeno’ sostiene que apoyará al candidato opositor Aécio Neves, del PSDB, en las próximas elecciones de octubre.
Sin embargo, la gran novedad estos días es que la crítica empiezan a llegar desde la propia organización. La directora ejecutiva del Comité Organizador Local de la Copa del Mundo, Joana Havelange, ha sorprendido a todos con sus palabras. Además, llama la atención que haya sido ella la que señala este tema cuando todo el país piensa que está en su puesto solo por enchufe. Es la nieta del expresidente de la FIFA, Joâo Havelange, e hija del expresidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), Ricardo Teixeira.
No obstante, esto no le ha impedido desahogarse completamente en las redes sociales: “No apoyo, no comparto y no vestiré de negro ningún día que haya partido durante el Mundial. Quiero que la Copa se desarrolle de la mejor manera. No voy a manifestarme en contra, porque lo que había de ser gastado, robado, ya fue. Si había que protestar, tenía que haberse hecho antes”, aseguró Joana.
Sin embargo, la directora ejecutiva apuesta por castigar a los responsables en las urnas: “Yo quiero que quien llegue de fuera vea un Brasil que sabe recibir, que sabe ser gentil. Quiero que quien llegue quiera volver. Quiero ver un Brasil lindo. Mi protesta contra la Copa será en las elecciones. Otra cosa, destruir lo que tenemos hoy no cambiará lo que se hará mañana”.