El culebrón permanente en el que vive el Valencia desde hace años parece no tener fin. La deuda es insostenible con la actual estructura del club, pero Bankia no termina de cerrar la venta al multimillonario Peter Lim, mientras que el resto de posibles compradores continúa al acecho.
Nuno Espírito Santo llegó para encabezar el proyecto por exigencias de Lim y del representante que va a hacer del Valencia un equipo top a costa de promocionar a sus jugadores. Los nuevos futbolistas valencianistas iban a dejar de ser propiedad del club porque la mayoría de las incorporaciones tendrían sus derechos cedidos a Jorge Mendes.
El equipo de Lim ya se había movido con mucha fuerza en el mercado, pero parece que muchos futbolistas se han empezado a poner nerviosos con la situación y se han buscado el futuro por otra parte. Uno de los jugadores que les interesaba era el talaverano Javi Espinosa. El jugador del Barça B quiere jugar en Primera División y en el equipo azulgrana no le garantizan esa opción por lo que decidió irse y escuchó los cantos de sirena que venían desde Valencia.
Su fichaje se daba ya por hecho en varios medios, pero parece que finalmente jugará en el Villarreal la temporada que viene. La Voz de Talavera asegura que, según fuentes cercanas al futbolista, su futuro está cada vez más cerca de Castellón. Sin embargo, parece que el futbolista habría preguntado por la situación del Valencia antes de tomar ninguna decisión.
Jorge Mendes había ejercido de intermediario en esta operación y llegó a acordar el contrato con Junior Minguella, el representante de Javi Espinosa. Todo estaba apalabrado pero, según El Gol Digital, Mendes terminó recomendando al jugador que se buscara otro equipo porque Lim no iba a conseguir la compra del Valencia.