Alfredo Di Stéfano, fallecido el pasado 7 de julio a los 88 años de edad, convivió los últimos siete años de su vida con Gina González, su secretaria personal y que fue contratada por el argentino para escribir su biografía. Una relación, que según la costarricense, no era bien vista por Florentino Pérez, y tal y como señaló en una emisora de radio argentina, fue el propio presidente blanco el que manipuló a la Justicia para que declararan a Alfredo mentalmente incapaz.
Gina, cincuenta años más joven que la saeta rubia, no se mordió la lengua: «Yo no quería creer en lo que me dijeron, pero el tiempo demostró que Florentino Pérez dio el visto bueno para demandar a Alfredo Di Stéfano, incapacitarlo, y dejarlo ante el mundo entero como un discapacitado mental, solo por querer quedarse con sus derechos de imagen en vez de pensar en hacerle feliz». Además comentó que uno de los hijos de Alfredo le advirtió del poder que tiene el máximo mandatario merengue, “Uno de los hijos de Alfredo me dijo: ‘Florentino va a por ti’”, comentó en el programa ‘La voz de la noche’.
Gina señala que fue el propio Di Stéfano el que la protegió ante Manuel Redondo, secretario personal del presidente, y el propio Florentino: “Redondo, secretario de Florentino Pérez, intentó convencer a Alfredo de que me dejara y Alfredo lo sacó diciéndole que 'en mi vida privada no se mete ni Cristo'. Lo mismo le espetó al presidente. Alfredo me protegió siempre porque él estaba tan enamorado de mí como yo de él. Luego, en el terreno profesional, Alfredo Di Stéfano fue para mí un obstáculo, nunca una ventaja».
No acabó aquí la costarricense y acusó a Florentino de ser una especie de dictador dentro del club: “Cuando yo digo que el Real Madrid no me aceptaba, hablo de tres personas. Poder sólo tienen tres personas en el club. Son Florentino Pérez, Manuel Redondo y José Ángel Sánchez. El resto son empleados que callan por temor a perder su posición o el trabajo», comentó enfadada ante los micrófonos de la periodista Mariló López Garrido.
Durante su estancia en España y tras el impedimento del Real Madrid de que Gina y Alfredo se vieran y se casaran, la joven de 38 años visitó la embajada argentina para exponer la situación. La respuesta de Carlos Bettinni, embajador, fue más que clara y así lo contó la costarricense: «Cuando fue a la embajada para hablar del aislamiento al que estaba siendo sometido Di Stéfano, Carlos Bettini, embajador argentino en España, me dijo 'la próxima vez que pidas ayuda no digas que tienes en contra al Real Madrid'. Entonces comprendí muchas cosas», aclaró.