La selección española se encuentra concentrada para jugar sus dos primeros partidos, después de que el Mundial pusiera los pies en el suelo a todos los españoles. Sin embargo, las rencillas que dejó la derrota todavía siguen muy abiertas, aunque los protagonistas quieran disimular.
Los problemas de Jordi Alba y muchos azulgranas con la prensa son recordados estos días en muchos medios. Asimismo, Vicente del Bosque tampoco se tomó muy bien que varios periodistas pidieran su dimisión y que varios madridistas le acusen de ser el enemigo número uno del que fue el club de su vida
Asimismo, el seleccionador quiso desmentir que sus diferencias con Del Bosque le hayan llevado a perder la educación. “El otro día estuve en Cardiff, en la final de la Supercopa de Europa di la mano al presidente del Madrid y le felicité. Bueno, pues algunos medios me acusaron de descortés por no saludarle. ¿Ustedes creen que le saludé? Pues claro que sí, le di la mano y la enhorabuena. Lo que quedó es que soy un malnacido. ¿Por qué? Por hacer daño», contó en una entrevista concedida a El País.
Además, Vicente Del Bosque aprovechó la situación para criticar el trabajo de otros periodistas. «Algún compañero suyo calificó de miserable la derrota. En el deporte no hay derrotas con comportamiento miserable. Fue un desastre, jugamos mal, pero miserables no fuimos. “Clima irrespirable”, escribió otro no sé dónde. ¿Qué clima irrespirable? Tenemos un grupo magnífico».
En cualquier caso, también quiso poner distancia sobre aquellos que quieren dar una imagen idílica de ‘la Roja’. «Hombre, algún día alguien pone mala cara, es inevitable, todos quieren jugar pero fueron cosas mínimas. Se dio alcance de gravedad una tontería absurda que no tuvo categoría ni de bronca, como lo del peto de Fàbregas, que no fue nada… Bueno, si quieres hacer daño encuentras excusas, pero es mentira, el grupo vivió de maravilla. Ni la convivencia fue mala ni el comportamiento miserable»
Por otro lado, el entrenador dio explicaciones sobre las decisiones técnicas que tomó durante el Mundial. «No me arrepiento de ser considerado con todos, aunque alguno como Xavi tal vez no lo entendiera. A Xavi no le quitamos contra Chile porque hubiera jugado mal ante Holanda, sino porque pensamos que era mejor vaciar el medio campo por dentro y meter más gente por delante de la pelota para no facilitar su presión. Creo que el principio no lo entendió mucho. Luego, creo que sí. En algunos foros he visto hostilidad, pero en la calle la gente ha sido cariñosa”
«Iker está en una situación ambigua, seguro que lo debe estar pasando mal, pero no quiero entrar en el día a día de los clubes», opinó sobre la situación del capitán de España.