El Real Madrid se impuso al Sevilla (2-1) en un encuentro que ganó con toda justicia, pero en el que terminó sufriendo más de la cuenta. El Madrid se adelantó en el marcador sin hacer excesivos méritos, pero pudo golear a un rival desaparecido al comienzo de la segunda parte. No mató el encuentro y casi termina pagándolo.
Isco y Jesé fueron los mejores, pero los blancos no pueden estar muy contentos por las lesiones de Ramos y James. En el Bernabéu solo se escuchaba una consigna entre el público. “Hay que ganar al Atleti como sea”. El derbi se ha convertido en una obsesión y los blancos llegan con una gran ventaja en la Liga, pero con tres posibles bajas importantes. La de Marcelo es segura por sanción, aunque Carletto anunció recurso en rueda de prensa.
Ancelotti anunció rotaciones, pero solo introdujo a Arbeloa y a Khedira como novedades y se dejó a Illarramendi nuevamente en el banquillo. Por su parte, Emery sacó un centro del campo con tres pivotes puros, recolocó a Carriço en el centro de la defensa y optó por Bacca como único delantero centro, mientras que Denis Suárez veía el inicio con los suplentes.
Sin embargo, nada más empezar el partido Vitolo se plantó solo frente a Casillas, pero el portero madridista desbarató la ocasión. Además, Ramos forzó en una carrera y sufrió un problema muscular que hizo que Nacho tuviese que entrar rápido a sustituirle. En cambio, no todo fueron malas noticias para los madridistas en el inicio del choque.
James logró de cabeza el primer gol del duelo, gracias a un buen centro de Marcelo, que llegó tras una larga jugada de combinación merengue. No obstante, el Madrid parecía nervioso en defensa y el Sevilla creaba peligro cada vez que se acercaba a las inmediaciones del área de Iker. Iborra consiguió enviar un balón al poste, tras entrar hasta la cocina, y Krychowiak cogió el rechace y mandó el balón al lateral de la red, dejando el susto en el cuerpo de todos los madridistas.
Después, Khedira también rozó el tanto con un trallazo descomunal que se fue rozando el palo de Beto, pero el partido estaba completamente en el aire. De hecho, Vitolo se plantó nuevamente solo frente al cancerbero madridista, pero Casillas la sacó esta vez con suspense en un despeje que se paseó por el centro del área del Bernabéu.
Todo apuntaba a goleada
El Madrid no tenía un partido relajado y, por si fuera poco, se le acumulaban los problemas en la enfermería. James se tuvo que retirar por un problema en el pie y tuvo que entrar Jesé en su lugar. Asimismo, en el Sevilla tampoco pudieron respirar tranquilos en ese sentido durante mucho tiempo. En la siguiente acción, Benzema chocó con Beto y el portero quedó conmocionado y tuvo que ser sustituido por el canterano Sergio Rico.
El meta había jugado ya tres partidos en primera división, pero en menos de un minuto supo lo que es jugar en el coliseum madridista. Una gran jugada de Isco terminó con un balón muerto que Jesé introdujo en la red en una jugada a la carrea. Además, el parón por la atención que reclamaba Beto vino bien al Madrid y Benzema pudo hacer el tercero rápidamente, pero el francés no pudo aprovechar el gran pase atrás de Arbeloa y su remate se fue lamiendo el poste. El choque ya parecía mucho más decantado y el tercero blanco estaba más cerca que el primero sevillista. De hecho, Khedira volvió a rozar el tanto en una jugada en la que entró por la derecha y su disparo cruzado se encontró con una gran mano de Sergio Rico.
El Bernabéu despidió al Sevilla y al colegiado con una sonora pitada en el descanso por el juego brusco de los hispalenses. Mbia pisó a Khedira en el descuento, pero el árbitro solo sacó la amarilla y el público también empezaba a pensar en proteger a los suyos de cara al derbi. Los sevillistas también se pueden quejar de un manotazo de Arbeloa en la cara de Bacca que quedó impune.
Tras el paso por los vestuarios, el panorama no cambio demasiado y el Madrid seguía creando mucho peligro a un equipo que ahora necesitaba abrirse para intentar sacar algo positivo. Bale volvió a protagonizar una jugada individual en la que falló una opción clara de gol. Tuvo opciones de pase, pero tampoco era nada fácil. El Bernabéu respondió con división de opiniones.
Mientras tanto, Jese deleitaba con sus regates por la banda izquierda. En una de esas, el ‘Bichito’ la pegó al palo en un lanzamiento casi sin ángulo, pegado a la línea de cal. El canario también conectaba con Isco y, gracias a una jugada entre los dos, el malagueño estuvo cerca de firmar su golito en una jugada ‘maradoniana’, pero su remate fue algo centrado y el portero pudo reaccionar para sacarlo.
Pero cuando más tranquilo estaba el Madrid, Vitolo se coló por la derecha y Marcelo le paró con falta. El colegiado le sacó una cartulina algo rigurosa y el brasileño no daba crédito consciente de que eso hacía que se perdiera el derbi por acumulación. Además, Iglesias Villanueva no vio un claro empujón a Varane dentro del área en una jugada a balón parado.
Finalmente, Aspas acortó diferencias a diez minutos del final con un disparo de churro tras una gran jugada de Vitolo. El Madrid tenía diez minutos por delante para sufrir. Finalmente, Casillas consiguió no encajar un gol más a pesar de que se mascó la tragedia en el estadio en unos últimos minutos con muchos temores.
REAL MADRID: Casillas; Arbeloa, Ramos (Nacho, min.9), Varane, Marcelo; Isco (Illarramendi, min.89), Khedira, Kroos; James (Jesé, min.26), Benzema y Bale.
SEVILLA: Beto (Rico, min.35); Diogo, Kolo, Carriço, Navarro; Iborra, Mbia, Krychowiak, Vitolo; Deulofeu (A.Vidal, min.53) y Bacca (Aspas, min.66).
Goles
1-0, min.12: James Rodríguez.
2-0, min.36: Jesé.
2-1, min.81: Aspas.
Árbitro:: Iglesias Villanueva (C.Gallego). Amonestó a Varane (min.45), Marcelo (min.60) e Isco (min.86) por parte del Real Madrid; y a Diogo (min.41), F.Navarro (min.43), Mbia (min.45+1), Carriço (min.66), Vitolo (min.70) y A.Vidal (min.76) en el Sevilla.