El entrenador portugués del Chelsea fue protagonista el pasado fin de semana en Inglaterra. Consiguió, por fin, su primer título con los ‘blues’ tras su vuelta a Londres y lo celebró por todo lo alto. Fue uno de los miembros del equipo técnico más activos y disfruto como un niño pequeño tras conseguir la Capital One.
Con el partido casi decidido, el Chelsea ganaba 2-0 al Tottenham, Mourinho fue protagonista de una imagen un tanto curiosa. El entrenador cogió un bote de agua y lo vertió contra la cámara. La imagen corrió como la pólvora por las redes sociales. Otra más para guardar en la retina como aquel ‘caballito’ a lomos de Callejón.