El Bayern de Múnich de Pep Guardiola se ha proclamado este domingo campeón de su 26ª Bundesliga con cuatro jornadas de antelación, gracias a la derrota del Wolfsburgo en casa del Borussia Moenchengladbach. Sin embargo, este es solo un triunfo más en la larga lista de éxitos del actual entrenador del conjunto bávaro.
Pep Guardiola lo ganó todo en su etapa como centrocampista en el famoso 'Dream Team', pero cuando tan solo hace nueve años de su retirada, su carrera como entrenador ya es mucho más exitosa. Guardiola suma 19 títulos en siete años, los mismos que Van Gaal y que Eriksson. En cambio, el holandés lleva 24 años de carrea a sus espaldas, mientras que el sueco entrena desde hace 35 años.
Sin embargo, lo verdaderamente llamativo es que el de Sampedor solo ha entrenado en 348 partidos en la elite (101 con el Bayern y 247 como culé), por lo que sale a un título por cada 18 partidos. Pocos entrenadores pueden decir que levantaron un año más de dos copas, pero el genio de La Masía lo ha cogido por costumbre.
Además, sus éxitos no llegan fruto de la casualidad de ganar en partidos estratégicos. Guardiola gana porque sus equipos son máquinas regulares durante toda la temporada. Tiene un 74,4% de victorias, un 16,4% de empates y solo pierde en el 9,2% de las ocasiones. Asimismo, en su etapa en Tercera con el Barça B también logró ascender al equipo a Segunda B con unos grandísimos números y se ganó la fama de técnico que confía en los más jóvenes.
Por si fuera poco, Guardiola puede seguir superándose en los siguientes meses, puesto que tiene a su equipo en una posición perfecta para ganar la copa alemana y la Champions League, a pesar de las bajas. Tiene contrato hasta 2016 y todo hace indicar que después de esa fecha su futuro estará lejos de Alemania, aunque la exigente afición del Bayern puede ponerse en su contra si el equipo no da la imagen esperada en la máxima competición continental.
En cualquier caso, Guardiola ha tenido la suerte de entrenar a dos equipos históricos del fútbol mundial en tiempos de bonanza. Habrá que ver si después de 2016 sigue con sus estadísticas tan demoledoras en otro club grande o empieza a perder la flor. Sería interesante verle en un banquillo más modesto. Hasta los más madridistas se quitarían el sombrero ante él si consigue resultados admirables con presupuestos más limitados. Todavía tiene 44 años y, aunque no espera hacerse viejo en los banquillos, tiene mucho tiempo para experimentar. Como futbolista pasó por España, Italia, Catar y México, por lo que como entrenador también es propenso a nuevos retos.