Hace pocos meses, Bartomeu parecía un cadáver profesional en los despachos del Camp Nou. Nadie apostaba por su continuidad, tras la destitución de Zubizarreta, pero él se empeñó en agarrarse al clavo ardiendo. Hizo las cosas muy bien en los últimos meses de su mandato y consiguió desligarse de la figura de Sandro Rosell.
Además, los títulos también le ayudaron a ganar popularidad. Asimismo, está consiguiendo que los socios barcelonistas piensen que con el ‘Caso Neymar’ en Cataluña es prácticamente seguro que todo quede en nada. En resumen, se ha convertido en un candidato ideal, cuando hace poco había pocos nombres que sonasen peor que el suyo en unos comicios.
No obstante, no se ha dormido en los laureles y ha sabido dar importantes golpes de efecto en el último suspiro. La renovación de Alves, la continuidad de Luis Enrique y el fichaje de Aleix Vidal ilusionan muchísimo a una afición que piensa que todo va sobre ruedas. Asimismo, el nombre de Laporta tampoco está del todo limpio y el resto de candidatos no tienen su currículum ganador, con lo que la necesidad de cambio es muy relativa.
Así las cosas, Bartomeu sabe que tiene mucho ganado, pero que los movimientos de Laporta en el mercado y su ‘guerra sucia’ con Abidal y otros puntos flojos de la gestión de la directiva del segundo triplete pueden arrebatarle el triunfo. Por todo eso, ‘Nobita’ está dispuesto a jugar la baza del ‘pelotazo’ en el mercado de fichajes. El que fuera vicepresidente deportivo dejo entrever que los fichajes no se convertirían en su baza electoral, pero la irrupción fuerte de Laporta y los ofrecimientos le han hecho cambiar de opinión.
De hecho, el entorno de la candidatura se ha encargado de filtrar a todos los medios catalanes que Bartomeu anunciará una gran promesa electoral que se conocerá entre ocho y seis días antes de las elecciones. Se trataría de un centrocampista español que milita en un equipo de la Liga y cuya contratación ya estaría apalabrada. En principio, este jugador solo sería culé si gana Bartomeu.
Koke, como sucesor de Xavi
En este punto, la quiniela de candidatos es muy reducida porque por desgracia la nómina de centrocampistas españoles titulares en la Liga BBVA es muy reducida. El regreso de Denis Suárez sería una operación independiente, puesto que la 'repesca' del jugador cedido no puede considerarse un fichaje en ningún caso.
Así las cosas, Vitolo, Iborra, Javi Fuego, Parejo, Bruno, Iturraspe, Illarramendi, Rubén Pardo, Granero… Muchos nombres, pero casi ninguno atraería un porcentaje de votos a tener en cuenta en unas elecciones. De hecho, dentro de ‘la Roja’ solo hay dos futbolistas que cumplan con los criterios avanzados por la candidatura continuista.
Koke sería sin duda alguna el que más papeletas tendría para vestir de azulgrana. Luis Enrique lleva tiempo detrás de él para que sea el sustituto de Xavi, pero en el Atlético quieren que el nuevo proyecto gire en torno a él. Simeone ya dijo que todos son transferibles excepto Koke y Godín. El centrocampista de 23 años habría pedido al Barça un año más para decidirse hace pocos meses, pero Bartomeu le habría hecho entender que las elecciones son el momento idóneo. Tiene una cláusula de 60 millones y este desembolso se explicaría mejor en clave electoral. Bartomeu habría hablado con Cerezo o con Gil Marín, con lo que Simeone habría tenido poco que decir al ver el dinero encima de la mesa.
Por otro lado, algún medio digital se atrevía a asegurar hace pocos días que Isco estaba dispuesto a ofrecerse sinceramente a las candidaturas culés, en contra de lo que hizo Sergio Ramos, que solo fue un movimiento para renovar. Las informaciones tenían poca credibilidad entonces, pero tras el anuncio de Bartomeu toman otro cariz. El malagueño podría cumplir su sueño de niño y vestirse de azulgrana. Sus perros Figo y Messi seguro que se sentirían orgullosos de él.
En cualquier caso, resulta difícil que Florentino dé luz verde a esa operación por mucho dinero que le ofrezcan y la cláusula de rescisión del ‘23’ es mucho más prohibitiva, aunque otros medios aseguran que el United también estaría dispuesto a pagarla como respuesta a la contratación de De Gea. El mediapunta lleva mucho tiempo jugando fuera de sitio. No ha escondido ante la prensa que en muchos momentos no ha estado contento, pero su fichaje sería un auténtico escándalo. Tendría que tener muchas ganas de complicarse la vida para dar el paso o haber cometido un fallo de cálculo similar al de Figo porque Bartomeu tiene muchas papeletas para ganar. Si el anuncio incluye a cualquier otro futbolista, Bartomeu corre el riesgo de decepcionar a los votantes por crear falsas expectativas.