Iker Casillas se ha despedido del madridismo por segunda vez en menos de 24 horas. En esta ocasión, el guardameta ha compartido protagonismo con el presidente, Florentino Pérez,, que le ha querido rendir homenaje en el palco VIP del Santiago Bernabéu en un acto cargado de formalismo y frialdad.
Florentino ha sido el primero en hablar para aclarar que Iker se va porque él quiere. «Iker nos deja porque ese fue su deseo. Nadie del Real Madrid le ha pedido que abandonase el club. Tuvo una oferta y nos pidió que valoráramos la oferta. Casillas se ha ganado que el club haga el esfuerzo de escucharla. Comprendo a Iker cuando quiere comenzar una nueva etapa. Me hubiera gustado que acabara su trayectoria en el Real Madrid, pero le comprendo y le entiendo», aseveró el presidente blanco.
El presidente del ACS también quiso restar importancia a la fría despedida del guardameta ante los medios del pasado domingo. «Iker quiso una despedida simple y austera», valoró. Además abrió la posibilidad de realizar un homenaje acorde a la importancia del portero dentro de la entidad: «Estamos trabajando para hacerle un partido homenaje».
«Me hubiera gustado tener un acto con todos los jugadores e Iker quiso un acto austero. Le he pedido que viniera a este acto. Tengo una buena relación con Casillas. Nunca ha dado ningún problema en este club y su actitud siempre ha sido ejemplar», afirmó Florentino al ser preguntado por una supuesta mala relación entre el excapitán blanco y él.
Por último, Florentino Pérez desmintió el supuesto interes que tiene el Real Madrid en David De Gea, guardameta del Manchester United: «De Gea es un gran portero y pertenece al Manchester United, que es un club amigo. No tengo nada que opinar de un club amigo». Además calificó a Casillas como «insustituible».
Por su parte, Iker en un tono irónico y para romper el hielo afirmó que esta despedida era «la definitiva”. Luego ofreció un breve discurso: “Gracias presidente por sus palabras. Quiero agradecer a los medios, a la junta directiva y a los madridistas su presencia aquí. Es raro porque ya hablo como jugador del Oporto. Es diferente pero habrá más momentos y los compartiremos entre todos. Quiero dar las gracias a todo el madridismo y a todos los que me han apoyado. Y a los que hemos tenido discrepancias lo siento de verdad. Tal vez fue una manera humana de expresar algo, pero apartado queda. Me quedo con las alegrías que se ha llevado la gente en este estadio y soy un madridista más que siempre que pueda intentaré ser un embajador. Estad seguros de que allá donde vaya, ahora voy a un país cercano pero donde sea, intentaré seguir haciendo lo mejor para el Madrid”.
Para finalizar, Casillas posó en el césped del Santiago Bernabéu con todos los títulos que ha conseguido a lo largo de su carrera en el club blanco. Ni Real Madrid ni Iker Casillas tenían la intención de pisar el césped del Bernabéu pero la presencia masiva de aficionados, a pesar de no haber sido convocados, ha hecho que cambien de opinión y que finalmente los presentes pudieran acceder al estadio para despedir a un mito del club. Unos 2.000 aficionados presenciaron los últimos pasos del cancerbero en el templo blanco al grito de «Iker, Iker, Iker…».