El Real Madrid sufrió la primera derrota de la temporada, frente al rival de mayor entidad al que se ha enfrentado hasta el momento. Sin embargo, puede darse por satisfecho con el resultado, puesto que solo llegó a la portería contraria gracias a disparos lejanos.
El Bayern tuvo muchísima más fluidez y dominó el partido, aunque se chocó una y otra vez contra un sistema defensivo que empieza a ser reconocible independientemente de los jugadores que estén en el campo en cada momento. En cambio, el equipo pierde toda la chispa sin Benzema, Cristiano y Bale (que no disputó ni un solo minuto), y con Isco y James jugando cada uno por su lado.
El partido del martes frente al Tottenham obligó a Rafa Benítez a realizar varios cambios este miércoles. El entrenador madrileño dio descanso a muchos de sus principales espadas, pero el equipo no perdió su sello en la primera mitad. El nuevo Madrid es un grupo que no pierde el orden en ningún momento, aunque la brillantez no acompañe durante muchas fases de los partidos.
Frente al Bayern, los blancos sufrieron para encontrar el balón, pero no concedieron muchas oportunidades, pese al gran dominio territorial de los bávaros. De hecho, el Madrid estuvo prácticamente inédito en el aspecto ofensivo en el primer acto y solo fue capaz de acercarse a los dominios de Neuer en jugadas a balón parado y disparos lejanos sin demasiado peligro.
Por su parte, el centro del campo de los de Guardiola hizo valer su superioridad numérica y sus ganas de vencer en casa. Müller lo intentó con ansia, pero las verdaderas oportunidades no llegaron hasta pasada la media hora de choque. El ‘25’ alemán estuvo muy cerca de inaugurar el marcador con un disparo defectuoso que chocó en Ramos, confundió a Keylor Navas y terminó golpeando en el poste.
Después, Douglas Costa descosió a la defensa blanca por primera vez en el partido y puso un caramelo en forma de pase atrás en el corazón del área, pero Götze no ajustó demasiado su disparo y se encontró con un Keylor Navas muy bien colocado. Los blancos empezaban a pedir a gritos la llegada del descanso porque Jesé estaba totalmente desconectado del resto, mientras que Kroos y Casemiro mantenían el orden, pero no eran capaces de darle fluidez al juego.
Por suerte para ellos, el árbitro no tardó en señalar el camino de los vestuarios y Benítez reorganizó a sus jugadores en la segunda mitad con varios cambios. Asensio e Illarramendi le dieron aire al once, que anteriormente había sido retocado por la lesión de Pepe, que dejó su lugar a Nacho. El portugués se fue a las primeras de cambio, por un problema aparentemente muscular.
Pudieron caer muchos más
Al poco de reanudarse el partido, Kroos golpeó un libre directo de forma magistral, pero Neuer la sacó de la mismísima escuadra. Sin embargo, Guardiola también movió el banquillo y metió en el campo al ‘coco’ Lewandowski, aunque en esta ocasión el polacó no estuvo tan certero como en otras ocasiones y falló un gol cantado que le había cedido Douglas Costa en el área pequeña. El centro del brasileño iba fuerte, pero el delantero estaba en el centro del ataque y disparó desviado inexplicablemente.
En cambio, las sustituciones durante el transcurso de la segunda parte terminaron rompiendo por completo el ritmo del Madrid. El Bayern empezó a mandar cada vez más, hasta que se hizo dueño y señor del partido por completo en el último cuarto de hora. Douglas Costa desbordó a los dos laterales con demasiada frecuencia y Keylor Navas tuvo que intervenir en varias ocasiones claves.
El costarricense sacó una mano cambiada preciosa a un gran disparo de Hojbjerg y detuvo con problemas un lanzamiento de falta de Alaba. Pero el cántaro empezaba a ir a la fuente demasiado y terminó rompiéndose cuando en el ambiente existía un claro aroma a penaltis.
Douglas Costa puso una falta lateral con veneno y Sergio Ramos no se atrevió a meter la cabeza para despejarla. Keylor Navas tampoco estuvo afortunado al quedarse debajo de la portería y Lewandowski fue el más listo de la clase para meter el exterior del pie y colocar el balón dentro de la portería con facilidad.
Finalmente, el gol llegó sin que el Madrid tuviese ningún margen de reacción y el Bayern pudo hacer incluso el segundo en un mano a mano en el que Keylor pudo con Douglas. El conjunto local se llevó la Audi Cup y al Madrid solo le queda el duelo del próximo domingo frente al Valerenga para concluir su pretemporada, puesto que sigue sin haber fecha para el Torneo Bernabéu.
BAYERN MÚNICH: Neuer; Rafinha, Benatia, Boateng, Alaba; Lahm, Xabi Alonso, Vidal; Götze, Douglas Costa y Müller. También jugaron: Rode, Lewandowski, Bernat.
REAL MADRID: Keylor Navas; Carvajal, Pepe, Ramos, Marcelo; Casemiro, Kroos; Lucas Vázquez, Isco, Cheryshev y Jesé. También jugaron: Nacho, Marco Asensio, Illarramendi, Modric, James, Arbeloa, Danilo y Borja Mayoral.
Goles
1-0, min.87, Lewandowski.
Árbitro: Felix Brych (ALE). Amonestó a Benatia (min.49) por parte del Bayern Múnich; y a Marcelo (min.32) y Ramos (min.71) en el Real Madrid.