La vida del máximo goleador de la historia del Real Madrid lejos de los terrenos de juego no deja de dar titulares. La vida privada del futbolista luso trae de cabeza a la prensa del corazón, pero lo que más transciende a la opinión pública es su supuesta filantropía.
Sin embargo, en esta ocasión, CR se ha atrevido a sincerarse con un periodista sobre un aspecto de su intimidad del que había hablado muy poco hasta el momento. El padre del madridista, Dennis Aveiro, murió hace diez años por culpa de una crisis renal producida por un alcoholismo continuado.
En cambio, Ronaldo nunca tuvo una mala palabra en público hacia su progenitor y se acordó de él con un emotivo mensaje en las redes sociales el día del décimo aniversario de su fallecimiento. Le recuerda como un hombre que amaba el fútbol y por eso jugó un partido al poco tiempo de enterarse de su muerte, a pesar de contar con permiso del entrenador para ausentarse, porque para él ver a su hijo con Portugal sería el mejor homenaje.
«Ese día quería jugar. Solo sabía que quería jugar. Quería jugar el partido en honor a mi padre. Quería marcar un gol por él. Me puse a prueba y puse a prueba a todas las personas que me quieren. Mi padre siempre me alentaba, me pedía que fuese ambicioso y se sentía orgulloso de lo que había conquistado en el fútbol. Sé que está presente ahora y que se siente muy orgulloso», contó Cristiano hace unos años.
En cambio, en su reciente entrevista concedida a The Times, Cristiano no esconde la realidad. «Mi padre era un borracho. Yo lo vi. Él no fue el padre que soñé tener«. De hecho, reconoce que no tenía mucha comunicación con su progenitor, más allá del fútbol. “Yo lo amaba, por supuesto, pero nunca tuve una conversación con él de la clase que estoy teniendo con usted. Tal vez una a lo largo de mi vida», contestó Cristiano al periodista.
Andrés Moreno, emocionado con el apoyo del crack
Además, en esa misma charla, el ‘7’ merengue aseguró que los insultos que le llegan desde la grada no le afectan. “Necesito al enemigo. Es parte de mi trabajo. Empiezan a gritar cuando toco la pelota. Esto ya empezó cuando tenía 18 o 19 años. No es un problema para mí. Es una motivación», declaró el futbolista que en varias ocasiones ha dedicado gestos de enfado al público rival.
Por otra parte, este mismo fin de semana ha trascendido que Cristiano Ronaldo regaló una camiseta firmada a Andrés Moreno, el hombre más obeso del mundo. Este mexicano de 37 años pesa 435 kilos y se va a someter a diversas cirugías para mejorar su calidad de vida. El equipo médico encargado de su caso espera que su peso al final del proceso ronde los 80 kilos.
El gesto que hizo Cristiano por este hombre fue muy pequeño, pero le ayudó muchísimo a coger el ánimo necesario para la batalla que le espera y a sentirse un poco menos solo en su lucha. De hecho, se echó a llorar cuando recibió la llamada del hombre que le anunció que CR estaba pendiente de su caso.
«Muchas gracias a todos, entre ellos a Cristiano Ronaldo por interesarse en mi caso. A veces piensas que ellos están en otro estrato, alejados de la gente y no es así; me siento como si me hubieran hecho un gran regalo de Navidad antes de hora«, declaró el protagonista a EFE.