Bravo, sin trabajo (7). El Espanyol creó peligro con sus llegadas al área, pero no con remates a portería. Tan sólo el córner cerrado de Asensio que rozó Álvaro, y que despejó rápido el chileno.
Alves, sin poder ofensivo (5,5). Se le echó de menos en ataque. Se sumó en alguna ocasión, pero con menor frecuencia que en otros partidos. En defensa por momentos perdió el sitio, aunque en líneas generales no estuvo mal.
Piqué, discreto (6). El central, muy pitado desde el inicio por la afición rival, no acogió demasiado protagonismo. Cumplió atrás y poco más. En ataque, cuando se incorporó en jugadas a balón parado, se le vio algo perdido.
Mascherano, una de cal y otra de arena (5). Estuvo rápido para despejar sobre la línea el balón en la jugada de mayor peligro del Espanyol, pero pudo ser expulsado por su imprudencia, tras una mano cercana al área. Se vio superado por Hernán Pérez en alguna ocasión.
Alba, con ganas (6,5). El lateral, al contrario que Alves, trató de aportar ofensivamente. No fue lo preciso que le hubiera gustado, pero lo intentó en numerosas ocasiones. Atrás, sin mayores problemas.
Busquets, sin culpa. El mediocentro sostuvo al equipo, jugó fácil y estuvo bien en líneas generales. Aunque como el resto del equipo, no estuvo igual de fino que en anteriores partidos.
Rakitic, sin peligro (5,5). El croata, en un partido donde la llegada de los centrocampistas era decisiva, no sumó nada ofensivamente. No conectó con los tres atacantes y eso supuso un problema para el Barcelona. Luis Enrique le sustituyó.
Iniesta, el mejor (8). Entendió rápido el partido. Trató de restar la presión del Espanyol, combinó bien y se sumó al ataque. Dejó varios detalles de su calidad. Sólo le faltó el gol, pero no estuvo acertado en esa faceta.
Neymar, con confianza (6). El brasileño, pese a que las cosas no salían, lo intentó. Sabe de su importancia en el equipo y desequilibró en varias jugadas. Sin embargo, en los momentos decisivos, sus pases no fueron certeros.
Messi, peligroso (7). El argentino fue el que más cerca estuvo del gol. Se movió mucho en ataque. Asistió y probó suerte con jugadas individuales. Al final, a balón parado es cuando estuvo más cerca. De nuevo la madera se topó en su camino.
Suárez, más a menos (6,5). El delantero arrancó el partido con ganas, y como principal foco del ataque. Aprovechó su velocidad para crear peligro desde la banda. En la segunda mitad, apenas tomó protagonismo y erró una gran ocasión de gol.
Luis Enrique, sin reacción (4). La propuesta agresiva de Galca se impuso en la primera mitad. El Espanyol, además, creo peligro a la contra. Dio entrada a Sergi Roberto, habitual esta temporada, pero no apostó por ningún otro jugador.
Roberto, alternativa tardía (6). El centrocampista ya ha demostrado su buen nivel este año. Sin embargo, apenas gozó de veinte minutos. No consiguió que el Barcelona llegara con asiduidad al área rival en los últimos minutos.