El Barcelona no ha comenzado bien el 2016. El equipo de Luis Enrique, pese a dominar gran parte del partido, fue incapaz de desequilibrar el marcador (0-0) ante un entregado Espanyol. Los locales pusieron la intensidad y también tuvieron opciones de alcanzar el triunfo. Un esfuerzo recompensado por la afición, que brindó una sonora ovación a los suyos al término del encuentro. El Atlético tendrá la posibilidad de ser líder en solitario si derrota al Levante en el Vicente Calderón.
Desde el inicio se palpó la tensión propia de un derbi. El Espanyol saltó al césped más enchufado y asfixió la salida de balón del Barcelona, que era incapaz de superar el centro del campo con el balón controlado. Con Caicedo como referencia, los locales atacaron con insistencia, aunque sin crear excesivo peligro sobre la portería defendida por Bravo. El guion cambió con el transcurso de los minutos. El conjunto blaugrana trató de pausar el intenso ritmo y poco a poco tomó el control hasta que llegaron las primeras oportunidades.
En el minuto ocho Luis Suárez recibió en la derecha y asistió a Alba, que se incorporó al ataque. Sin embargo, quedó de manifiesto que el disparo al primer toque no es la especialidad del lateral, que remató mal. Conforme el Barcelona se adueñaba del encuentro, los blanquiazules aumentaban su agresividad, en busca de cortar una dinámica positiva del rival. En el dieciocho, Messi combinó con Neymar y el brasileño asistió a Suárez, pero el esférico se le quedó atrás al uruguayo, que no pudo disparar.
El Espanyol no renunciaba al ataque, y a balón parado gozó de su mejor ocasión. Un córner muy cerrado de Asensio, tras ser ligeramente cabeceado por Álvaro, creó muchas dificultades a Bravo. El guardameta despejó el balón, pero este quedó sobre la línea. Mascherano, rápido, alejó el peligro. Todo, poco después de una discusión entre el delantero local y el central visitante, que el colegiado resolvió con una amarilla para ambos. El argentino fue más protagonista aun cuando interrumpió con la mano un centro de Asensio. El árbitro interpretó que no hubo voluntariedad y no le perdonó la segunda tarjeta.
Antes del descanso el Barcelona tuvo tiempo para crear más peligro, con Messi e Iniesta como grandes protagonistas. El argentino asistió al español, que dentro del área no acertó a rematar. Poco después, el centrocampista probó suerte con un disparo lejano que se marchó por poco. Pero la mejor oportunidad fue obra de Messi, a balón parado. Pero su lanzamiento de falta se topó con la escuadra, como ya le sucedió hace escasos días frente al Betis. Con esa mejoría del Barcelona llegó el final de la primera mitad.
Tras los quince minutos de tregua, el equipo de Luis Enrique se mostró más reconocible. Los pases eran muchos más rápidos y el Espanyol no lograba robar el balón con la facilidad del primer tiempo. Una gran jugada de Suárez por la izquierda, estuvo cerca de convertirse en gol, pero el disparo de Neymar tocó en un central. En el minuto cinco, Messi lo intentaba de nuevo. Eran los mejores minutos del líder. Pero el Espanyol, bien colocado, lo intentaba a la contra. Y Hernán Pérez, tras una gran jugada individual, bien pudo haber deshecho el empate.
Poco a poco el cansancio hacía mella en los futbolistas locales, fruto de la presión y la alta intensidad que habían mantenido. El Barcelona trataba de aprovechar su mejor momento, pero el gol, aunque suene raro, no llegaba. Y eso que pronto (minuto 55) se presentó otra gran ocasión. Suárez recibió a escasos metros de la portería y, tras zafarse de Álvaro, envío el balón al palo con Pau López sin opciones de detenerlo.
Pese al evidente dominio del Barcelona, el Espanyol se mantenía cómodo. El Barsa empezó a impacientarse y sus ataques fueron menos precisos. De forma aislada, lo intentó Messi, y hasta Neymar de chilena. Pero el encuentro parecía destinado al empate. Y así fue, a pesar de que el Espanyol pudo incluso llevarse los tres puntos si Javi López, en el minuto noventa, hubiera asistido mejor a Asensio. Al final, reparto de puntos merecido, con un estadio entregado que agradeció el esfuerzo de los suyos.
ESPANYOL: Pau López; Javi López, Álvaro, Roco, V. Álvarez; Jordán (Abraham, min.33), Diop; Hernán Pérez, Asensio, Burgui (Gerard Moreno, min. 59); Caicedo.
FC BARCELONA: Bravo; J. Alba, Mascherano, Piqué, Alves; Iniesta, Busquets, Rakitic (Sergi Roberto, min. 26); Messi, Suárez y Neymar.
Árbitro: González González (C.Castellano-Leonés). Amonestó a Álvaro (min. 21), Javi López (min.30), Jordán (min.41), V. Álvarez (min.60) y Diop (min.43) por el Espanyol, y a Mascherano (min. 21) por el FC Barcelona.