El Real Madrid sigue buscando argumentos para defenderse ante la FIFA, por el incumplimiento del Reglamento sobre el Estatuto y la Transferencia de Jugadores en lo referente a fichajes de menores de edad, pero no parece tener todas consigo para evitar el castigo con sus recursos a Apelación y al TAS. Los casos de los hijos de Zidane y el hermano de Garay parecen de fácil explicación, pero el asunto no está tan claro con Manuel Godoy.
De hecho, el padre de este menor venezolano contó a Radio 4G que «un día le dijeron que no podía entrenar. Nos dijeron que la FIFA estaba investigando». Además, Ramón Godoy cuenta que el club blanco quiso destruir las pruebas de que su hijo jugaba para ellos. “El Real quiere esconder a Manuel. No han vuelto a ponerse en contacto con nosotros. Nos llegaron a decir que quemaron su ficha”.
Sin embargo, mientras que al chico “le afecta bastante lo que pasa”, su padre está dispuesto a luchar junto al Madrid para que pueda volver a jugar allí, pero no entiende que el club intente esconderle cuando solicitaron la “residencia no lucrativa”. Asimismo, Ramón Godoy asegura que nunca firmaron ningún documento oficial, aunque “sí que le mandaron una carta donde le comunicaba que tenía que incorporarse a la temporada”.
Además, el entrenador del Alevín del B del Real Madrid. Álvaro de Benito, reconoció en El Chiringuito que el club pidió a los técnicos que no alinearan a ninguno de los futbolistas mencionados en el informe de la FIFA por precaución. Esos futbolistas todavía no tienen la prohibición de jugar, algo que llegará con el tiempo, puesto que se abre un periodo para regularizar sus situación ante el máximo organismo del fútbol mundial. El Barça ya pasó por lo mismo y la mayoría de los afectados se quedó mucho tiempo sin poder participar en encuentros oficiales.
Por otra parte, según publican varios medios, el Madrid prefiere echar balones fuera con este asunto y cree que hay una mano negra detrás de este asunto. El Bayern de Múnich sería el responsable de las denuncias anónimas que destaparon los casos del Real Madrid y el Atlético, con el objetivo de desprestigiar al fútbol español. En cambio, esta versión no sorprende a mucha gente, puesto que el Madrid copia la estrategia que siguió el Barcelona en su momento, cuando acusó a Florentino Pérez de ser el informador de Blatter.