El Atlético de Madrid venció al Eibar, con lo que vuelve a meter presión al Barcelona y no se desengancha de la lucha por el título. No obstante, el equipo colchonero sufrió mucho más de lo esperado para superar a los vascos, que solo dispararon una vez a puerta en todo el encuentro.
El central Sául dio la nota negativa al regalar el gol a los de Mendilibar en una acción en la que se relajó en exceso. Sin embargo, el canterano colchonero supo resarcirse y marcó a balón de cabeza el gol que le daba la vuelta al marcador. Antes ya había igualado el partido Giménez con otro remate de pura raza.
El Atlético aburrió a su público en la primera parte, pero cuando vinieron mal dadas volvió a sacar su cara más inconformista, esa que le llevó a dar guerra al todopoderoso Barcelona con nueve hombres. Sin Jackon, Torres marcó el dichoso gol cien y su público enloqueció con él en la celebración.
Simeone cubrió las bajas en defensa con Saúl, Gámez y Lucas y apostó por un once ofensivo de inicio. Carrasco, Correa y Griezmann compartieron protagonismo el ataque, pero el equipo salió al campo con una actitud muy diferente al de su último choque liguero frente al Barça. Los colchoneros no encontraron claridad en su fútbol en toda la primera parte y esos 45 minutos se pueden resumir en un atasco monumental.
Solo Correa y Carrasco pusieron algo de vértigo en un juego de poca altura, mientras que el Eibar ni siquiera se asomó a la puerta de un inédito Oblak. Correa y Griezmann lo intentaron con dos disparos de media distancia que salieron desviados, aunque el Atlético tuvo problemas para hacerse con el dominio territorial, puesto que los azulgranas se encontraban muy cómodos en campo ajeno.
De hecho, el espectáculo en la primera mitad fue tan reducido que la afición rojiblanca despidió a los suyos con pitos al descanso. El árbitro se llevó lo suyo por alguna decisión discutida, pero la actitud de los jugadores tampoco gustó en absoluto, mientras que en la grada se acordaban de Fernando Torres.
Keko despertó a sus ex
Además, tras el paso por los vestuarios, Saúl le complicó la vida a los suyos al controlar fatal un balón sencillísimo, cuando era el último hombre. Enrich aprovechó para robarle el balón y asistir a Keko, que con toda la tranquilidad del mundo superó a Oblak sin problemas. Sin embargo, con el marcador en contra, el Atlético tuvo un arrebato de vergüenza torera y se fue a por el partido sin miramientos.
Correa puso a prueba a Riesgo en un remate de cabeza desde el área pequeña, pero el guardameta estuvo rápido a la hora de sacar la mano y mandar el balón por encima de su portería. En cambio, el portero se quedó con el molde cuando intentó salir a buscar un saque de esquina. Giménez se le anticipó e igualó el marcador, mientras que el apartado anímico empezaba a jugar claramente a favor de los enfurecidos locales.
En esos minutos, el Atleti llegaba sin muchos problemas al área y el Eibar concedía muchísimos saques de esquina, un pecado mortal con el equipo de Simeone enfrente. De hecho, en otro de esos córner llegó el segundo gol tras un gran lanzamiento de Koke que Saúl cazó en lo más alto. Por si fuera poco, ese tanto dejó al Eibar medio grogui y sin capacidad de respuesta, por lo que Carrasco pudo hacer el tercero en una contra rapidísima que culminó con un disparo cruzado que se marchó muy cerca de la portería armera.
Después, Vietto marcó un gol que el árbitro anuló de forma correcta y Simeone decidió terminar el partido al ataque con Torres en el lugar de Carrasco. El Niño pudo marcar el gol de la tranquilidad en un mano a mano con Riesgo, pero llegó muy apurado y su remate desde el suelo se marchó desviado a la derecha del arco. El '9' entró al terreno de juego muy enchufado y también lo intentó con un disparo desde la frontal que salió cerca del poste, mientras que Riesgo solo podía seguirlo con la mirada.
Finalmente, Vietto metió un balón al área pequeña y Torres se tiró al suelo para empujar el balón a las redes. El delantero logró por fin su gol número 100 con la camiseta del Atlético y el Calderón enloqueció con él en los minutos finalya es. Llevaba toda una vuelta sin marcar, pero ahora los colchoneros sueñan que encadene una buena racha, una vez que no tiene que competir con Jackson por el puesto de delantero puro. La renovación está en el aire y por eso el público es especialmente cariñoso con él.
ATLÉTICO DE MADRID: Oblak; Lucas, Saúl, Giménez, Gámez; Carrasco (Torres, min.75), Koke, Gabi, Thomas (Óliver, min.59); Correa (Vietto, min.59) y Griezmann.
EIBAR: Riesgo; Capa, Lillo, Dos Santos, Juncà; Escalante (Inui, min.70), Dani García; Keko (Saúl Berjón, min.85), Adrián (Radosevic, min.90), Jota; Enrich.
Goles
0 – 1, min.47, Keko.
1 – 1, min.55, Giménez.
2 – 1, min.64, Saúl.
3 – 1, min.92, Torres.
Árbitro: Fernández Borbalán (C. Andaluz). Amonestó a Thomas (min.16) y Griezmann (min.85) por parte del Atlético de Madrid y a Keko Gontán (min. 67) y Lillo (min.46) en el Eibar.