El pasado junio de 2012 el Glasgow Rangers, el mítico equipo escocés, despareció tras 139 años de historia. El club se declaró en banca rota debido a graves problemas económicos, entre los que se incluía una deuda de 26 millones de euros con el fisco británico. El empresario Charles Green se hizo con la entidad por una cifra de siete millones de euros y aseguró a los hinchas que no cambiaría el estadio ni ninguna otra cosa. El club fue refundado como los Rangers, pero no pudo mantenerse en la primera división de Escocia.
“Los clubes miembros de la SPL han votado a favor de admitir al Rangers Football Club como miembro asociado de la Premier League escocesa”, explicaba el organismo. “Sin embargo, el equipo tendrá que comenzar la temporada 2012/2013 en la Scottish Division 3 (equivalente a la cuarta categoría)”, añadía. Todo un tormento para un equipo que más veces (57) ha sido campeón de Liga.
El Rangers ha tardado más de lo esperado en regresar a la máxima competición. Los dos primeros cursos ascendió, pero el pasado año, cuando ya soñaban con recuperar su sitio, quedaron terceros. Su ausencia ha propiciado que el eterno rival, el Celtic de Glasgow, haya ganado sin oposición las últimas cuatro Ligas. El pasado martes Los Rangers certificaron al fin su regreso a la Premiership al imponerse (1-0) al Dumbarton, ante la presencia de 48.568 fans que llenaban el Ibrox Park.
Lee Wallace, jugador de Los Rangers, reconocía el apoyo de los aficionados ante los micrófonos. “Escuchen, estos son los mejores fans del mundo”, decía mientras festejaba la hazaña. El capitán prosiguió su discurso y aseguró que les habría gustado “marcar más goles para el público”. Sin embargo, echó la mirada atrás y valoró lo que el equipo ha hecho después de sufrir la sanción: “Cada fan y cada jugador puede estar orgulloso de lo que hemos logrado en los últimos cuatro años”.
La última gran cita que les aguarda en esta temporada es el choque ante el Celtic, enfrentamiento que se podrá ver cuatro años después gracias a la Copa Escocesa. El ‘Old Firm’ es uno de los derbis más antiguos del fútbol y es un anticipo de la rivalidad que de nuevo se vivirá a partir del próximo curso. Los objetivos para la temporada que viene los ha fijado ya Mark Warburton, técnico de Los Rangers: “Deberíamos mirar hacia delante. Queremos lograr 91 puntos en la Liga y empezar la nueva campa con fuerza”.