Las cámaras de televisión hacen un seguimiento de todos los jugadores que participan en los partidos de la Champions League y eso sirve para estimar la distancia que recorren todos los protagonistas en cada encuentro. Dicho seguimiento constata que frente al Wolfsburgo el Real Madrid corrió menos que nunca en la competición continental esta temporada. Solo recorrió 104 kilómetros entre todos sus jugadores y se quedó a 7 kilómetros de su mejor marca, que consiguió en la vuelta de los octavos de final frente a la Roma.
Asimismo, el Madrid fue el segundo equipo que menos corrió en la ida de los cuartos de final, solo por detrás del PSG. El Atlético recorrió cinco kilómetros más que los blancos con un hombre menos y el Bayern llegó 11 kilómetros más lejos que los hombres de Zizou.
Sin embargo, el Real Madrid debe tener otra forma de medir esta estadística ya que Zidane señaló en rueda de prensa que contra el Wolfsburgo su equipo consiguió una gran marca en cuanto a kilómetros recorridos. “Al final a lo mejor me equivoqué yo. No había falta de intensidad. Fue el segundo partido en que hicimos más kilómetros y en alta intensidad. El fallo fue que nos marcaron dos goles en dos errores y no pudimos darle la vuelta. Pero ya está”, dijo el técnico para cargarse con la mayor parte del peso de la derrota.
En cambio, el entrenador dejó caer que volvería a sacar a Danilo y exculpó al brasileño de la responsabilidad de la derrota. “No me arrepiento de nada. Asumo mi responsabilidad y no lo hizo tan mal como estoy escuchando. Lo hicimos todos mal. Es fácil señalar a uno o dos, pero a mí me gusta otra cosa”, declaró el entrenador.
Por otra parte, 'ZZ' se mostró completamente convencido de que el Bernabéu volverá a ser una caldera en el partido de vuelta y no teme que el equipo se pueda encontrar un escenario hostil en su propio escenario. “El público va a estar con nosotros. El martes nos jugamos la temporada. Lo sabemos. Es un partido importante. Me gusta cuando las cosas se ponen difíciles y al público también. Es un momento difícil. Nadie se esperaba el partido de ida, pero ya pasó”.
Partido a partido con rotaciones
No obstante, Zidane encaja con naturalidad las críticas que hace pocos días le situaban en los altares por ganar al Barcelona y ahora le ponen en duda todo su trabajo. “Sabemos cómo es el cargo de estar en este club, pero yo no miro a eso. Lo que me anima es lo que estoy haciendo cada día. Estoy haciendo lo que me gusta, pero no pienso lo que puede pasar de malo porque yo soy positivo. Estoy tranquilo con todas estas cosas. Ya veremos lo que puede pasar, pero en positivo”. Pese a todo, el entrenador sabe que no tiene garantizada la continuidad en el puesto después del verano. “Ahora mismo pienso en lo que queda de temporada y tengo un rol y asumo mi responsabilidad. A final de temporada veremos qué sucede, pero ahora estoy muy tranquilo”.
Zidane prefiere mantener la mente puesta siempre en el próximo partido y frente al Eibar dará descanso a algunos de sus jugadores más habituales, por lo que es muy probable que entren Isco y James de inicio, puesto que el galo soltó una sonrisa cuando le preguntaron por esa opción. “Mañana va a jugar Cristiano. Va a haber rotaciones, pero para ganar el partido de mañana. El martes será otro partido”.
Por último, el técnico no podrá contar con su '9' titular este fin de semana, aunque intentará forzar para que llegue al duelo europeo del martes. “La idea para estos dos jugadores es que sigan entrenando aparte. Karim sigue doliéndose del golpe en la rodilla. Vamos a hacer un trabajo individual con el equipo. Espero tener a los dos para el martes”, concluyó el míster.