El Atlético de Madrid superó con facilidad al Granada y se colocó momentáneamente con los mismos puntos que el Barcelona en lo más alto de la tabla. El equipo de Simeone se adelantó muy pronto en el marcador gracias a un Koke enchufadísimo, pero se desconectó del partido en los minutos posteriores.
El Granada tuvo ocasiones para empatar, pero tras el paso por los vestuarios, el Atlético se puso un poquito más serio y con eso sirvió para llevar al marcador la diferencia de calidad entre ambos equipos. Torres encadena cuatro partidos consecutivos con gol y ha creado una sociedad ilimitada con el mejor Koke, que está de vuelta desde hace unas semanas.
Oblak volvió a ser poco más que un espectador porque sus defensas le cuidan muy bien. Rochina fue el mejor futbolista del conjunto andaluz. Gabi vio amarilla y no podrá estar en el choque en San Mamés, que se antoja decisivo para las aspiraciones ligueras de su equipo.
En el Dia del Niño en el Calderón, Simeone utilizó a Lucas para cubrir la baja de Filipe y jugó con el resto de su equipo de gala con Torres nuevamente en liza. Sin embargo, el primer tiempo frente al Granada fue radicalmente opuesto a lo que se vio días antes frente al Barcelona. El Atlético volvió a tirar de fútbol control y Andrés Fenández no tuvo mucho trabajo.
De hecho, los rojiblancos solo inquietaron la portería rival en los primeros minutos gracias a Koke. El canterano colchonero tuvo una primera ocasión clara gracias un buen centro de Juanfran, pero su disparo salió desviado. No obstante, en la siguiente acción de peligro el centrocampista no perdonó. Lucas entró por la banda izquierda, Torres remató en un primer momento, pero el balón rebotó y quedó muerto para el remate del '6'.
El Granada dio un sustito en el Calderón
Todo hacía pensar que los de Simeone podían decidir por la vía rápida, pero en los minutos posteriores el equipo local se relajó y permitió que el Granada se metiera en el partido. El Atlético tenía un amplio porcentaje de posesión del balón, pero no conseguía profundizar en la línea defensiva nazarí y en ocasiones dejaba demasiados espacios en una contra. Por eso, Miguel Lopes encontró una autopista por su carril para llegar ante Oblak, pero el lateral optó por el pase atrás en lugar del remate directo y dio opciones para que el portero enviase el balón a córner.
El Granada daba síntomas de desesperación por su situación en la tabla, pero esas ganas le hacían competir con todo frente a un Atlético algo menos competitivo de lo habitual. Rochina creaba muchas complicaciones cada vez que entraba en contacto con el balón y lo intentaba con disparos lejanos siempre que podía. En el más peligroso, el mediapunta logró estrellar el balón
ATLÉTICO DE MADRID: Oblak; Juanfran, Godín, Savic, Lucas; Saúl, Koke (Óliver Torres, min.75), Gabi, Carrasco (Augusto Fernández, min.55); Griezmann (Correa, min.63) y Torres.
GRANADA: Andrés Fernández; Lopes (Foulquier, min.46; Fran Rico, min.71), Babín, Ricardo Costa, Biraghi; Doucuré, Rubén Pérez, Khrin (Barral, min.63); Rochina, Peñaranda y Cuenca.
Goles
1-0, minuto 15. Koke.
2-0, minuto 59. Fernando Torres.
3-0, minuto 85. Correa.
Árbitro: Prieto Iglesias (C.Navarro). Amonestó a Gabi (min.50), Augusto Fernández (min.81), Óliver Torres (min.88), por el Atlético, y a Doucuré (min.27), Peñaranda (min.38), Biraghi (min.47), Barral (min.74), Rochina (min.74), por el Granada.
el palo con muchísima violencia, mientras que Oblak solo pudo hacer la estatua.
Asimismo, la segunda parte empezó con muy poquito ritmo, aunque el Atlético tuvo todavía más control del juego en los primeros minutos tras la reanudación. En cambio, Torres rompió la monotonía con una jugada en la que envió el balón por encima de la portería al intentar picarlo por encima de Andrés Fernández. Pero 'el Niño' tuvo una ocasión clara segundos después gracias a un pase al espacio de Koke y sí tuvo la calidad suficiente para levantar el balón con sutileza ante la salida del portero para marcar el tanto de la sentencia.
Finalmente, Simeone administró esfuerzos con los cambios y Correa redondeó el marcador en los últimos minutos. Saúl prolongó un pelotazo con la cabeza y lo convirtió en una asistencia perfecta para el argentino. El '16' superó a Andrés por abajo con todas la tranquilidad del mundo.