La mayoría de los analistas futbolísticos coinciden a la hora de asegurar que el delantero tiene un rol muy diferente en el fútbol moderno. Sin embargo, ese discurso lleno de retórica tiene poco fondo cuando se intenta contrastar con los números en la mano. De hecho, lo único cierto es que en el fútbol goles son amores y al punta se le tiene que juzgar por hacer su trabajo, que no es otro que marcar goles.
Por eso, medio Bernabéu piensa que Benzema no es un jugador digno de ser titular indiscutible durante tantos años en el Real Madrid. El curso pasado estuvo mucho más fino de cara a gol y sumó 28 tantos en todas las competiciones, pero no hizo ni un solo gol en las eliminatorias de la Champions y tuvo menos transcendencia en el juego que sus dos compañeros de ataque.
El ‘9’ repartió menos asistencias que Gareth Bale y que Cristiano Ronaldo, a pesar de que ambos tienen mucha más fama de egoístas. Asimismo, la comparación también es odiosa en el caso de Luis Suárez, un jugador que ocupa su misma posición en el Barcelona, puesto que el uruguayo repartió 26 asistencias, por la ocho del francés.
Asimismo, en los números de los dos tridentes se vio a las claras que el delantero centro flojea en el caso de la BBC, mientras que en la MSN, Neymar fue de largo el más discreto, con una parte final de la temporada un tanto decepcionante. Además, los números goleadores de los dos tríos en la presente temporada están claramente decantados del lado azulgrana, ya que Messi, Suárez y Neymar suman ya 21 goles por los ocho de Benzema, Bale y Cristiano Ronaldo.
Benzema desaparece con demasiada frecuencia
Sin embargo, mientras que los focos siempre se centran en Cristiano Ronaldo (le culpan de no marcar en momentos importantes, cuando es el que más lo hace, sin ir más lejos en partidos frente al Barça), Benzema tiene la cualidad de pasar mejor desapercibido. Así las cosas, tras 45 minutos frente al Eibar, el jugador que todo el mundo destaca por su clase y por su gran toque, solo entró en contacto con el balón en cinco ocasiones, un dato realmente paupérrimo a pesar de que Zidane alegó que sufría un pinchazo en el muslo para sustituirle al descanso. En ese mismo periodo de tiempo, Kroos hizo 38 pases, por los 17 que realizaron tanto Cristiano como Bale.
El galo solo fue capaz de dar tres pases buenos, además de fallar una entrega y un intento de remate. No obstante, este no ha sido un hecho aislado en lo que va de temporada, puesto que según datos de la Liga, en los cinco partidos que ha jugado en esta competición solo ha dado 53 pases en 244 minutos de juego, lo que significa que tarda más de cuatro minutos y medio en encontrarse con uno de sus compañeros en la competición doméstica. Morata, que tampoco convence a medio coliseo blanco y no está considerado un virtuoso técnico como su rival por el puesto, se esfuerza algo más por entrar en juego y conecta un pasé cada cuatro minutos. Bale y Cristiano tardan menos de tres minutos como media en dar un pase en lo que va de campeonato doméstico.
Por otro lado, Luis Suárez participa mucho más que los dos delanteros centros blancos, pese a que tarda algo más de tres minutos en conectar un pase, por lo que se demuestra que la influencia del delantero centro en el juego es cuanto menos relativa, si se comparara con los datos que obtienen jugadores de cualquier otra posición. Messi y Neymar se implican mucho más en la elaboración que Bale y Cristiano, puesto que el argentino tarda algo más de minuto y medio en dar un pase en cada partido, mientras que el brasileño lo hace cada dos minutos aproximadamente
Felipe Poza