«Yo me voy al Manzanares, al estadio Vicente Calderón…» Así se escribe el himno del Atlético de Madrid, que pese a que no modificará un ápice su letra, si perderá gran parte de su sentido, después de que esta mañana Javier Tebas, haya confesado que el nuevo estadio del Atlético de Madrid de La Peineta, se denominará Wanda, en referencia el grupo empresarial que posee el 20% del capital del Atlético de Madrid. Sus palabras no han gustado nada en la entidad rojiblanca, que ha reconocido que aún no han tomado esa decisión, pese a que es una de las opciones más serias que tienen entre manos.
Tebas se ha ido de lengua. El presidente de la Liga de Fútbol Profesional ha mencionado esta mañana en los desayunos de Europa Press que el próximo estadio del Atlético de Madrid se denominará Wanda, a secas, sin ningún tipo de ‘apellido’. Su hipótesis parece ir bien encaminada, ya que era una de las opciones que barajaba el club rojiblanco para tildar a La Peineta. Poco después de desvelar este hecho en la mañana de este jueves, las redes han hervido por el poco atractivo de ese nombre.
En el Atlético de Madrid no han sentado nada bien las palabras de Tebas, expresadas sin consentimiento alguno. Así, uno de los mandatorios de la Liga, se gana otro enemigo público, añadido a sus enemistades con los otros dos grandes conjuntos de la Liga: Real Madrid, que tiene actualmente cinco demandas interpuestas contra LaLiga; y el Barcelona, que en muchas ocasiones ha señalado su malestar con las decisiones del presidente de la LFP.
La entidad rojiblanca ha desmentido para Mundo Deportivo que la decisión del patrocinador de su feudo esté decidida: “En este momento no es la línea más caliente”, han indicado, aunque sí reconocen que es una de las propuestas que tienen en mente. Pese a que a Tebas lo confesó en un tono bromístico, no sería extraño que el Calderón pasase a denominarse Wanda, ya que el grupo Wanda Madrid Investment posee el 20% del capital de los colchoneros, a cambio de 45 millones de euros.
El objetivo es que el nuevo patrocinador aporte al menos diez millones por temporada, en un contrato que se extienda durante cinco temporadas. Un dinero, que aunado al de otras compañías y el precio de las entradas, permitiría costear no a muy largo plazo la inversión realizada en la Peineta, donde se mudará el Atlético de Madrid la próxima temporada.
Alberto Puente