Keylor, decisivo (7). Tuvo varias intervenciones de mérito en los últimos minutos de la segunda parte. Quizás se pudo estirar algo más en el segundo tanto, pero en ningún caso se puede considerar que cometiera un error de peso.
Carvajal, sin mucha profundidad (5,5). Jugó mucho mejor que el partido de semifinales. No tuvo problemas en defensa, pero igualmente tampoco aportó demasiado en ataque, ya que sus pocos centros no encontraron rematador.
Marcelo, una buena sociedad con Benzema (6,5). Estuvo muy cerca de marcar en una jugada en la que combinó con el galo, pero no le dio buena dirección a su remate. Creo peligró con sus subidas por banda, aunque tampoco rompió como en sus mejores tardes.
Ramos, al borde de la expulsión (4,5). Despejó al centro en la jugada del segundo tanto. No fue capaz de marcar en una llegada en la que el balón se le quedó muerto en el área y casi ve la segunda amarilla en una jugada en la que el árbitro prefirió no ser muy riguroso.
Varane, un fallo importante (4,5). No hizo un mal partido en líneas generales, pero su falta de contundencia en la jugada del primer gol permitió que el Kashima se metiera de lleno en el encuentro.
Casemiro, todavía fuera de forma (4). No aportó prácticamente nada en la circulación del balón. Estuvo lento en muchas transiciones y todavía no disfruta de la jerarquía que tenía antes de su lesión.
Kroos, con menos tensión de lo habitual (4). No tuvo la presencia en el juego que suele tener porque no corrió ni se ofreció como otras veces. Un remate suyo muy defectuoso sirvió para asistir a Cristiano en el cuarto.
Modric, llegador (6,5). Fue el mejor del centro del campo porque llegó de forma constante desde segunda línea. Un disparo suyo sirvió para que Benzema firmase el primer tanto del choque.
Lucas Vázquez, desborde constante (8,5). Llegó constantemente por banda derecha y no se cansó de pedir el balón con insistencia. Provocó el penalti que supuso el segundo gol y se entendió a la perfección con Benzema.
Cristiano Ronaldo, el hombre que marca de tres en tres en los días malos (7). Abusó de las filigranas y bicicletas en la primera parte, aunque en muchas ocasiones le salieron realmente defectuosas. No aportó gran cosa al juego y en algún lance estuvo incluso egoísta, pero cuando todo se puso serio se vistió con el traje de rematador y finiquitó el partido.
Benzema, todocampista (9). Marcó un gol de oportunista y después se dedicó a hacer jugar a todos sus compañeros. Se esforzó por entrar en juego en cada jugada y dejó varios gestos técnicos de mucha categoría. Su asistencia en el tercer gol del partido fue vital.
Zidane, bien en la charla; mal en los cambios (6,5). Tomó la iniciativa justo antes de la prórroga para pedir a los suyos un punto más y tuvo capacidad para motivarles. No obstante, no se entiende muy bien que decidiese prescindir de Lucas, cuando era el jugador más peligroso en ese momento. Quería jugar con carrileros, pero el gallego también es el jugador idóneo para ocupar esa posición.
Isco, excesiva conducción (5). Su aparición en la segunda parte del partido coincidió con un gran bajón del equipo. Mejoró sus prestaciones en la segunda mitad, pero a veces se entretuvo demasiado con el balón en los pies.
Kovacic, poco para lo que merece (5). Jugó un cuarto de hora muy correcto, aunque el partido ya no tenía la máxima exigencia. Pese al mal partido de Kroos y de Casemiro, Zidane no le dio mucha bola.
Nacho, sin tiempo para demostrar gran cosa (-).
Morata, pocos minutos pero suficientes para firmar un jugadón (7). Firmó un jugadón impresionante con varios recortes preciosos, aunque un defensa evitó el tanto bajo palos. Seguro que esperaba jugar más, pero aún así salió al campo con una actitud digna de admirar.
Felipe Poza