Visit Saudi, la empresa responsable del turismo de Arabia Saudí, se ha convertido en patrocinador del Mundial de fútbol Femenino. Por supuesto, esta polémica decisión ha suscitado muchas críticas contra la FIFA.
El Mundial Femenino es una de las grandes citas deportivas de este año. Se celebrará entre el 20 de julio y el 20 de agosto entre Australia y Nueva Zelanda. Hay muchas expectativas depositadas en el torneo y también mucha ilusión por parte de los aficionados. Prueba de ello es que a pesar del tiempo que falta para que arranque, ya se han vendido más de medio millón de entradas.
En los últimos días, la FIFA ha llegado un acuerdo con Visit Saudi, la empresa que se encarga de gestionar el turismo en Arabia Saudí, como patrocinador del Mundial. Por supuesto, la Federación ha recibido una oleada de críticas y son muchos los sectores que les han pedido explicaciones.
Nueva Zelanda, uno de los países anfitriones, ha emitido un duro comunicado en el que aseguran estar “decepcionados” con este asunto. Es más, anuncian que tanto ellos como Australia han escrito de manera conjunta a la FIFA para que aclare lo antes posible la situación.
”En caso de que esta noticia sea correcta, nos sorprende y nos decepciona porque la FIFA no nos ha consultado nada a la Federación de Nueva Zelanda sobre esta cuestión. Como sedes del mundial femenino, las federaciones de Nueva Zelanda y Australia han escrito de forma conjunta a la FIFA para aclarar la situación”, reza el comunicado.
Las críticas contra la FIFA
Human Rights Watch, en la misma línea, ha mostrado un “desprecio impactante” ante esta decisión. La polémica, evidentemente, se han centrado en la falta de derechos que tienen las mujeres en Arabia Saudí. Por ese motivo, critican que una auténtica fiesta del fútbol femenino, como es el Mundial, vaya a estar ‘ensuciada’ por un país que en absoluto respeta sus derechos.
En los últimos años, Arabia Saudí ha comenzado una clara estrategia de apertura al exterior. Uno de los principales objetivos del país es lavar su imagen a través del deporte, aunque las leyes vigentes siguen siendo estrictas para las mujeres saudíes. Por eso, ellas siguen necesitando el permiso de un hombre para casarse, para recibir determinados servicios médicos e incluso la figura masculina más cercana puede denunciarla por ‘desobediencia’ o ausencia del hogar.
Minky Worden, directora de iniciativas globales de Human Rights Watch, ha repasado los principales motivos por los que la FIFA debería retirar inmediatamente el patrocinio de Visit Saudi.
“Es un desprecio impactante por el sufrimiento y la represión en curso de los valientes defensores de los derechos de las mujeres en Arabia Saudí, otorgar a la empresa de turismo estatal saudita el patrocinio de la Copa Mundial Femenina de 2023”, ha afirmado.
”Vale la pena recordar que, en fecha tan reciente como 2018, a las mujeres y las niñas de Arabia Saudí no se les permitía practicar deportes en las escuelas, ni siquiera ver deportes en los estadios. En lugar de lavado deportivo con patrocinios para intentar rehabilitar su imagen global, sería mucho mejor para Arabia Saudí emprender reformas fundamentales de derechos humanos, incluida la defensa de los derechos básicos de las mujeres y las niñas”, ha recordado Worden.
Amnistía Internacional también se ha pronunciado y lo ha hecho a través de Nikita White. Consideran que el patrocinio en “bastante irónico”, puesto que en el país no se respetan los derechos fundamentales de las mujeres y están sometidas constantemente a una tutela masculina.
”Sería bastante irónico que el organismo de turismo de Arabia Saudí patrocinase la celebración más grande del deporte femenino en el mundo cuando consideras que, como mujer en Arabia Saudí, ni siquiera puedes tener un trabajo sin el permiso de tu tutor masculino”, ha señalado.
«Las autoridades saudíes tienen un terrible historial de abusos contra los derechos humanos, incluida la represión de las defensoras de los derechos de las mujeres. La campaña del llamado líder reformista Mohammed bin Salman no es más que un truco publicitario para tratar de diversificar la economía. Las autoridades saudíes que patrocinan la Copa Mundial Femenina serían un caso de libro de texto de lavado deportivo», ha añadido White para zanjar el asunto.