Esta semana se han disputado las dos semifinales de Copa del Rey, que han enfrentado al Osasuna y al Athletic de Bilbao, por un lado, y al Real Madrid y al Barcelona por otro. Ambos encuentros han estado reñidos, pero coinciden en que tanto el Osasuna como el Barcelona ganaron a sus rivales por la mínima.
Abde le da ventaja al Osasuna
El miércoles se disputó la primera semifinal en el Estadio de El Sadar. Los dos conjuntos salieron bastante prudentes al terreno de juego, sin querer arriesgar y encerrándose atrás cuando su rival atacaba lo más mínimo. Abde fue uno de los primeros en intentar sorprender al guardameta rival, pero el Athletic estaba muy bien plantado en defensa. Los vascos tuvieron varios intentos, uno de los más destacados del primer tiempo llegó por medio de Muniain. Cogió el balón y ejecutó una rápida carrera por la banda que a punto estuvo de sorprender a Herrera, pero el balón se fue alto.
El Osasuna no estaba, ni de lejos, en su mejor momento del partido. Se les veía nerviosos sobre el terreno de juego y el partido se marchó al descanso con tablas en el marcador. Sin embargo, todo cambió en el primer minuto de la segunda pate. Abde cogió un fantástico balón al hueco, esquivó a Vivian, encaró a Agirrezabala y batió a Unai Simón para hacer el primer y único gol del partido.
A partir de ahí, El Sadar se convirtió en una auéntica fiesta. El tiempo corrió sin demasiadas ocasiones, pues el Athletic de Bilbao tampoco hizo mucho para conseguir el empate. Y así, serán los vascos los que se verán obligados a darle la vuelta al marcador en el partido de vuelta, que se jugará en San Mamés. Será el próximo 4 de abril a partir de las 22:00.
El Madrid cae en casa ante una sólida defensa del Barcelona
La segunda semifinal, la que enfrentó al Real Madrid y al Barcelona, se disputó en el Santiago Bernabéu. Los blancos salieron bien al terreno de juego con intensidad, con ganas de anotar un gol tempranero y con una ocasión de Luka Modric. Los blancos presionaron mucho y eso no permitía a los culés crear oportunidades, incluso Karim Benzema llegó a batir a Ter Stegen, aunque el colegiado anuló el gol por fuera de juego.
El partido se fue igualando a medida que crecía también la tensión entre los jugadores. Un error en la salida de Camavinga permitió que el Barcelona llegara al área rival con mucho peligro. Ferran arrancó la jugada, Kessié ejecutó, pero el balón terminó rebotando en Militão. Nacho no pudo despejarlo y el futbolista brasileño del Madrid anotó en propia puerta.
El gol se analizó en el VAR por un posible fuera de juego, pero finalmente se dio como válido. Fue un jarro de agua fría importante para los blancos, que lo intentaron a toda costa sin éxito.
La segunda parte tuvo una tónica similar, con mucha más frustración para los de Carlo Ancelotti, pues el Barça se cerró atrás y su defensa era infranqueable. Lo intentaron con centros laterales, que se convirtió en el mejor rescurso de los blancos, pero sin éxito. Las ‘torres culés’ impedían el paso de cada balón y ni siquiera la frescura de los cambios consiguió derribarlas.
El partido, a medida que avanzaba, cada vez estaba más rotos. Intentaron el empate hasta el pitido final, pero finalmente los azulgranas se llevaron el partido. La vuelta será el próximo 5 de abril en el Camp Nou, aunque el próximo 19 de marzo se volverán a ver las caras en el partido de Liga.