Las capitanas de todos los equipos de la Liga F tenían previsto llevar un brazalete morado durante la jornada 21, que se disputa este fin de semana, como reivindicación por el pasado 8 de marzo. Sin embargo, la RFEF lo ha impedido al hacer referencia al Reglamento de Competición y recordar la prohibición de hacer actos publicitarios durante los partidos.
El pasado miércoles, 8 de marzo, la mayoría de instituciones, clubes y organismos deportivos se teñían de morado para reivindicar la figura femenina y reflejar que la igualdad debe ser siempre uno de los valores del deporte. Sin embargo, cuando hablamos de la importancia de las reivindicaciones durante todo el año, y no únicamente un día, nos referimos a este tipo de cuestiones.
Este fin de semana se disputa la jornada 21 de la Liga F —Primera División femenina— y todos los clubes tenían previsto que sus jugadoras portaran un brazalete morado conmemorativo del 8M. La Liga F envió un comunicado a la RFEF para informar de las acciones que se iban a llevar a cabo —el uso del brazalete por parte de las jugadoras y del cuerpo técnico, además de mostrar una pancarta con el lema ‘Por ti, por mi, por todas’—.
Núria Mendoza (@nuria_mendo ) también se pone el brazalete
— Levante UD Femenino (@LUDfemenino) March 10, 2023
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La Liga F únicamente informó de las acciones previstas, pues como ya aclaró el Consejo Superior de Deportes, las competencias de este torneo pertenecen a la Liga F y no a la RFEF. La Federación comentó que no había ningún inconveniente, pero pideron que tuvieran en cuenta el punto 8 del Reglamento de Competición, tal y como ha informado el Diario Marca.
Este punto del reglamento hace referencia a la manera de utilizar la publicidad y prohíbe expresamente cualquier manifestación política o religiosa. En otras palabras, la RFEF consideró que portar ese brazalete morado podía tener connotaciones publicitarias.
«La publicidad necesariamente deberá tener contenido comercial, sin que puedan ser objeto de incorporación en la indumentaria de juego cualesquiera marcas, signos distintivos, anagramas, emblemas y/o imágenes que supongan de hecho, o puedan suponer manifestaciones de tipo político o religioso o su utilización sea considerada contraria a los intereses de la RFEF o de la LPFF, como tampoco está permitido el uso de otros espacios de las equipaciones y complementos como el brazalete de capitán, para introducir cualquiera de ellos, sin que esté previa y expresamente utilizado por a LPFF y por la RFEF», reza el punto 8 del Reglamento de Competición.
Ante la respuesta de la RFEF, la Liga F habló con Finetwork —patrocinador principal de la competición femenina— para informar que debían llevar a cabo la acción de los brazaletes morados, pero sin portar su marca. Es más, la versión final de este símbolo no incluía ningún tipo de emblema publicitario.
El brazalete morado se utilizó en actos protocolarios antes de empezar los partidos, pero las capitanas se lo tuvieron que cambiar por el que utilizan habitualmente tras una recomendación del equipo arbitral. Utilizar el brazalete morado hubiera sido únicamente un gesto reivindicativo que se puede equiparar al uso de un crespón negro en señal de luto.
Tras este fin de semana, la dispuesta vuelve a estar servida, pues la RFEF dice que en ningún momento lo ha prohibido, mientras que la Liga F culpa directamente a la Federación.