Jenni Hermoso ya ha declarado ante la Fiscalía por el beso no consentido de Luis Rubiales, pero hasta ahora no se había manifestado públicamente. Lo ha hecho en un evento en el Salón de la Fama del Fútbol de Pachuca (México), donde ha sido homenajeada junto a otros futbolistas.
Después de las declaraciones de otros implicados en el caso, esta semana le ha tocado el turno a Hermoso. La futbolista de la Selección Española ha recalcado que el beso no fue consentido y que no se sintió representada ni como jugadora ni como persona.
«Yo estaba viviendo algo histórico y pensé que algo así me iba a acarrear consecuencias. Yo no hice nada para encontrarme con esa situación«, ha explicado en su declaración. Después, ante las versiones que Rubiales se ha encargado de difundir, Jenni cuenta en primera persona cómo vivió aquello.
«Lo primero que le digo al abrazarle fue ‘la que hemos liado’. El pega un salto sobre mí, yo me mantengo firme para sostenernos. A la que baja me dijo que ‘este Mundial lo habíamos ganado gracias a mí’. Lo siguiente que recuerdo son sus manos en mi cabeza y no recuerdo haber escuchado nada más», ha afirmado.
«No me lo esperaba, no me esperaba que en ese escenario… Era la entrega de medallas de un Mundial. Mucha emoción, mucha alegría, pero yo no busqué ese momento ni hice nada para que se llevase a cabo este acto«, ha continuado.
Hermoso también ha ratificado las presiones que sufrió por parte de Rubiales y de su entorno: «Fuí y me dijo que se estaba formando una gorda con el beso y que le tenía que ayudar, que tenía que salir con él en un vídeo cuando parásemos en Doha. Decía que le estaban llamando acosador. Yo le dije que no, que ya le había dicho antes que se iba a liar. Yo me sentí muy incómoda».
«Él me estaba pidiendo que le ayudase a solucionar un acto que él provocó. Yo me sentía como una víctima. Yo no tenía por qué ayudar a nadie. ¿Si me sentí coaccionada? Claro. Yo en ningún momento me pude sentir bien. Estaba en shock de una celebración. Incluso una compañera mía me dijo que estuviese atenta porque Vilda estaba dando vueltas por el avión intentando hablar con mi familia», ha explicado.
«Le decían a mi familia que yo había sido muy importante, que me lo merecía y que me intentaran convencer para que ayudase a que se restara importancia al acto. ¿Si se utilizó a mi familia para convencerme? Claro. Ahí había 100-200 familiares, no sé por qué justamente se paró con la mía», ha añadido.
¿Y por qué conocemos con exactitud esta declaración? Pues bien, porque alguien se ha encargado de filtrar su testimonio. Jenni ha pedido al juez que garantice su privacidad y que guarden los testimonios como procede porque ahora mismo no se siente segura para declarar. Es más, ya ha anunciado, a través de su agencia, que tomarán medidas legales por vulnerar sus derechos.
Jenni Hermoso habla en un acto en México
Poco después de su comparecencia, Jenni Hermoso ha sido homenajeada en un acto en el Salón de la Fama del Fútbol de Pachuca (México) y ha aprovechado para lanzar algunos mensajes importantes. No se refiere de forma directa a Rubiales ni a lo ocurrido, pero sí que aprovechó la ocasión para lanzar un discurso muy emotivo e introducir algunos mensajes importantes.
«La noche del 20 de agosto del 2023, al levantar la Copa junto a mis compañeras, pude sentir las manos de mi padre cuando me llevaba a entrenar, la sonrisa de mi madre viéndome jugar, y la alegría de toda mi familia compartiendo el sueño de una pequeña futbolista que quería ser campeona del mundo. He jugado al fútbol toda mi vida; tengo 33 años, pero hace unas semanas, sobre el campo del Australia Stadium en Sídney, volví a ser niña una vez más.
Aunque ha pasado poco tiempo, me sigo preguntando qué fue lo que hicimos esa noche. Ganamos un título, dimos la vuelta al mundo y nos convertimos en uno de los mejores equipos de la historia; pero en el fondo, logramos algo mucho más humano, más trascendental. No fuimos campeonas para alzar un trofeo que se queda en las vitrinas, recibir un bono de compensación o salir en miles de portadas que se arrugan con el tiempo: fuimos campeonas del mundo porque era la única forma que nos quedaba para ser escuchadas, respetadas y valoradas.
Mi Selección nacional cambió la forma de ver el fútbol femenino de muchas personas. Estoy segura de que millones de niñas alrededor del mundo se han sentido identificadas y protegidas por este grupo de jugadoras valientes, comprometidas y honradas, que en cada paso que han dado siempre han pensado en el futuro de todas ellas.
Han pasado muchas cosas desde entonces, quizá sacrificamos algunas alegrías, alguna celebración, y, sin merecerlo, sufrimos más de la cuenta en un momento histórico para nosotras. Tengo claro que tenemos una responsabilidad enorme con las nuevas generaciones. A todas esas personas que no tienen un altavoz para hacerse escuchar quiero decirles que esta lucha es de todos.
Ganamos en el campo y fuera de él para asegurarnos un deporte y una sociedad inclusiva que nos proteja a todos. Y a todo el mundo quiero decirles: ¡Se acabó! Soy Jenni Hermoso, soy jugadora de fútbol y soy esa niña que logró ser campeona del Mundo«, ha añadido para cerrar su discurso. Por supuesto, fue una de las protagonistas y de las más homenajeadas de la noche.