El jefe del equipo Red Bull, Christian Horner, ha asegurado este lunes que el fabricante francés Renault podría abandonar el Mundial de Fórmula 1 si no se les permite seguir desarrollando sus motores la próxima temporada.
Renault, que suministra motores a Red Bull y a su marca hermana Toro Rosso, ha quedado rezagado respecto a los motores Mercedes y Ferrari; los nuevos propulsores V6 turbo híbrido fueron introducidos en 2014. La laguna en el reglamento respecto al desarrollo de los motores finaliza en 2016.
Horner explicó a los periodistas en el Gran Premio de Canadá que los campeones de Mercedes deberían pensar en mejorar la imagen del deporte antes de resistirse al cambio. «Estamos en una situación precaria en términos de compromiso de Renault para el futuro. Si efectivamente cierran eso -parar el desarrollo del motor- en febrero, (Renault) está diciendo adiós al campeonato«, afirmó.
El mandatario de Red Bull destacó que la FIA podría dar un tiempo prudencial para que los equipos puedan adaptarse. «(Mercedes) debe comportarse como un adulto y pensar en ello. Y la FIA haría bien en decir qué es lo mejor para la Fórmula 1. Si la Fórmula 1 puede permitirse perder un fabricante de motores, pueden parar la evolución el 28 de febrero», indicó.