Este fin de semana se celebró en la localidad austriaca de Freizeitzentrum uno de los eventos más relevantes del karting internacional. En un escenario idílico, dentro de una localidad donde las montañas ofrecen una estampa de película, el circuito Speddworld garantiza espectáculo, cuando los jóvenes más prometedores del mundo curren por él.
Además, este domingo el clima fue inmejorable para la práctica del automovilismo e incluso caluroso teniendo en cuenta las temperaturas que se suelen registrar en la zona, con máximas de 33 grados durante el día de carrera. En los días previos, el equipo DPK Racing ya había demostrado que tenía un gran ‘feeling’ con el circuito.
El sábado, el equipo consiguió clasificarse directamente para la final entre los 55 participantes de la prueba. Eso permitió que el equipo cogiese moral, para empezar la gran final completamente lanzado. En la pista había 35 coches el gran día, con lo que era importantísimo huir del tráfico.
En vista de los resultados, José Antonio Gómez cumplió su objetivo con creces, ya que terminó la carrera en segundo lugar, muy cerca del vencedor, Pavel Laksa. Tras ellos, Siim Leedmaa entró muy alejado, a casi cuatro segundos de distancia. José Antonio se coló de esta forma entre los dos primeros pilotos de Tony Kart, un equipo muy potente que llevó a esta competición más de una decena de coches.
Por todo eso, el equipo terminó eufórico, ya que este evento era el primero para José Antonio con un chasis grande y no pudo estrenarse de mejor manera en ‘Minimax’, la categoría que alberga a los pilotos de 10 a 14 años. Rodó siempre muy rápido en las 17 vueltas que se giraron al circuito de 1.160 metros.
Por otra parte, en la carrera ‘Micromax’, (de 8 a 12 años), los grandes afortunados del fin de semana fueron Mateusz Lenart, Maximilian Tarillion y Karol Pasiewicz, que coparon un podio sin representación española.
