Fernando Alonso ya no es ningún chaval. Tiene 34 años y ya es de los pilotos mayores de la parrilla. Solo Raikkonen, Button y Massa le superan en edad, mientras que su equipo es perfectamente consciente de que no le quedan muchos años al más alto nivel. El jefe de McLaren es el primero que admite que el bicampeón del mundo “es como una flor que se empieza a marchitar”, en una entrevista concedida a la revista F1 Racing.
Sin embargo, la actitud del ovetense es mucho más calmada en las últimas semanas. Tras su sonoros reproches a Honda en Japón, Alonso se ha vuelto a convertir en el hombre de equipo ideal. «Cabeza agachada y a seguir trabajando», dijo en su última comparecencia ante los medios.
El campeón del mundo en 2005 y 2006 puede perder los nervios en caliente, pero cuando lo piensa en frío se da cuenta de que no tiene más salida que continuar en su actual equipo. Los 35 millones de euros que se embolsa al año le ayudan a callarse, puesto que sabe que Hamilton es intocable en Mercedes, Ferrari nunca le repescará y ninguna otra formación tiene ni la más remota opción de ganar un título a corto plazo.
Por eso, empieza a hacerse a la idea de que volver a ganar un campeonato más es poco menos que una utopía, si Honda no despierta de una vez por todas. El asturiano ya anunció que no espera llegar a las 300 carreras y que quiere cumplir su actual contrato, lo que significa que su intención es retirarse al final del 2017.
Boullier alaba el compromiso de Alonso
Además, por lo que parece en su equipo están contentos con su trabajo y no le tienen en cuenta su salida de tono puntual. «No creo que Fernando vaya a perder la paciencia», declaró el jefe del equipo McLaren Eric Boullier, en su última entrevista en F1 Racing.
Asimismo, Boullier considera que en todo este año no ha cambiado nada que pueda producir la 'espantada' de su piloto franquicia. «Está comprometido con nosotros con un contrato multianual, sin opciones ni nada, esa es una verdadera afirmación».
En cambio, el jefe de McLaren sí teme que debido a los malos resultados el asturiano pueda perder la pasión que tanto le caracteriza. «El único peligro que puedo ver es que él es un competidor real y necesita la emoción de la competición, así que hacer una vuelta con un coche que no puede hacer nada mejor que un 17º puesto, podría hacerle perder su emoción”, aseguró el francés.
Además, para ser todavía más gráfico en su explicación utilizó una curiosa metáfora. “Sabes, es como una flor que se empieza a marchitar, Honda es consciente de esto también, así que necesitan dar lo que prometieron«, dijo el jefe de McLaren, para enviarle un nuevo ‘recado’ a la parte japonesa del equipo.