El MP4-31 todavía no ha echado a andar, pero las previsiones del equipo británico en 2016 vuelven a ser desconcertantes. Los test de los neumáticos Pirelli serán el 25 y el 26 de enero, pero en esa fecha difícilmente se verá el potencial real del nuevo coche de Alonso.
De hecho, en esa fecha se empezará a probar el nuevo motor, pero seguramente se utilizarán muchos componentes del 2015. En cambio, en los entrenamientos del 22 de febrero sí se verá el verdadero nivel del coche, ya que se espera que la presentación oficial del nuevo bólido sea una o dos semanas antes.
Sin embargo, la idea base sobre la que girará el nuevo diseño será la misma que en 2015. El dichoso “tamaño cero” del motor se mantendrá en la configuración del nuevo coche, ya que Honda, que achacó a esa concepción del chasis de McLaren todos sus males, ha vuelto a ceder y volverá a fabricar un propulsor de tamaño muy reducido.
“Queremos resolver los problemas de ERS (sistema de recuperación de energía) y también los problemas de fiabilidad antes de Melbourne. Eso es técnicamente lo que debemos hacer y como equipo”, aseguró Yasuhisa Arai en su última comparecencia ante los medios.
Sin embargo, el máximo responsable de Honda en Fórmula 1 ha intentado transmitir humildad a la hora de hacer un pronóstico de cara a Melbourne. “Le hablo muy sinceramente, queremos entrar en la Q3. Eso es ser muy honesto”, aseguró el japonés, cuando el año pasado habló de ganar la carrera de Australia.
No esconde su sueño de podio
En cualquier caso, Arai no renuncia a estar en el podio a lo largo de 2016. «Antes de los test invernales de 2015, dije algunas cosas sobre el podio y todos dijeron que tenía una boca muy grande. Espero que podamos conseguir el podio, pero no puedo decir ahora mismo dónde o en qué carrera. Todos, no sólo yo, esperamos estar en una posición mejor. El primer paso es llegar a la Q3”, opinó un hombre que sabe que otra mala temporada podría costarle el despido.
Por otra parte, el jefe del equipo McLaren, Eric Boullier, apunta un punto más de presión a su socio, cuando asegura que la paciencia de sus pilotos no es infinita. «En 2015 Fernando Alonso y Jenson Button creyeron en lo que hacíamos porque siempre fuimos transparentes con ellos. Pero, evidentemente, no quieren pasar otro año como este. Están en Fórmula 1 para luchar por victorias o, como mínimo, para ser competitivos».
En cambio, Boullier mantiene que la moral del asturiano permanece intacta. «Finalizado el Mundial, he leído algunos comentarios de nuevo de Fernando en los que sigue diciendo que no se arrepiente de su decisión de fichar por McLaren y que cree en el equipo, algo que repite cada dos semanas. Y cuando va a la fábrica, dice lo mismo».
Además, Boullier volvió a recalcar que en su garaje existe una gran unidad y saca una buena lectura del 2015. “Lo malo será bueno para McLaren porque trajo humildad, y quizá de forma extraña, el ambiente en el equipo fue bastante bueno”, afirmó el francés.